Además de Junior Alonso, Marcos Díaz y Jorman Campuzano, Boca cerró una incorporación muy importante, la de Iván Marcone. El volante central reúne una serie de condiciones que lo convierten en un jugador idóneo para el momento que está atravesando Boca y tiene todo para brindarle un salto de calidad y jerarquía al plantel que comanda Gustavo Alfaro, quien ya lo conoce por haberlo dirigido en Arsenal y sabe que puede exigirle y que puede esperar de él.
El Xeneize se encuentra en un proceso lógico de duelo y reestructuración luego de haber perdido una final tan importante como la de la Copa Libertadores ante el eterno rival, River. Por ello, si bien es cierto que hasta que la pelota vuelva a rodar no habrán certezas sobre si el plantel está tocado o recuperado por el golpe, la suma de nuevos jugadores puede aportarle frescura al grupo, y más si reúne las condiciones futbolísticas de Marcone.
Otro punto clave en la importancia de esta incorporación es el presente del jugador, que supo sostener un buen nivel desde hace varios años. Fue un pilar fundamental en el Lanús de Jorge Almirón campeón del certamen local en 2016 y finalista de la Copa Libertadores del 2017 ganada por el Gremio y en su paso por el Cruz Azul consiguió la Copa México del 2018 y se convirtió en un jugador importante para la Maquina Cementera, que no tenía deseos de desprenderse de él y debió acoplarse a la voluntad del futbolista.
Uno de los motivos que acercó a Marcone a Boca fue el deseo de volver a vestir la camiseta de la Selección argentina. Si bien es cierto que nunca se afianzó como una opción fija para el combinado albiceleste, el mediocampista sabe que podrá ser tenido en cuenta de cara a la Copa América que se disputará en Brasil a mitad de año si tiene un buen desempeño en el club de la Ribera, ya que será observado más de cerca que jugando en el fútbol mexicano.
Marcone llegará para sumar en un sector de la cancha en el cual a Boca no le sobran futbolistas. Si bien es cierto que Wilmar Barrios, Pablo Pérez y Nahitan Nández, habituales titulares, aún no han dejado el club, está la posibilidad concreta de que puedan hacerlo. En caso que no se vayan, aportará distribución y juego en la mitad del campo, algo que a Boca le faltó en sus últimos partidos ya que las características principales del colombiano y el uruguayo son la voluntad, el despliegue y la recuperación.
Además, ante la grave lesión de Fernando Gago, que sufrió la rotura de su tendón de Aquiles derecho, llegará para suplirlo, ya que poseen características similares. También en caso de que Pérez no abandone el club, podrá asociarse con él y potenciarlo, ya que el ex Newell´s mostró su mejor versión en Boca cuando contó con volantes de juego y manejo cerca, como cuando pudo compartir cancha con Pintita.
Por esas razones, incorporar a Marcone fue una decisión correcta por parte del entrenador Alfaro y el director deportivo Nicolás Burdisso, al menos desde lo previo. Ahora lo que resta es que consiga demostrarlo adentro de la cancha y ratifique que es el jugador más idóneo para este momento de Boca.