Fue el cimbronazo de la semana. El fallido penal de Enzo Pérez determinó el primer paso para una final impensada, que sin duda atraerá la atención de muchos. Una reedición moderna y futbolística de David contra Goliat tendrá cita el próximo sábado a partir de las 13.30 (hora de Argentina) en un duelo que pese a la lógica y a los antecedentes también puede regalar imprevistos.

El Al Ain, casi un desconocido por las latitudes sudamericanas, se convirtió en el segundo equipo de la Confederación Asiática en meterse de lleno en una final del Mundial de Clubes, ya que Kashima Antlers lo había conseguido en 2016 a dejar en el camino a Atlético Nacional de Colombia. Con un poco más de medio siglo de vida y un palmarés rico en campeonatos locales, donde ostenta la suma de 13 ediciones de la Liga Árabe del Golfo, siete de la Copa del Presidente, tres de la Copa de la Federación, cinco de la Supercopa, la deuda está puesta en el plano internacional, ya que sólo logró conquistar en una oportunidad la Liga de Campeones de la AFC, en 2003. Ganarle a los dirigidos por Santiago Solari sería tocar el cielo con las manos.

Su arribo al torneo más importante de clubes organizado por la FIFA se dio gracias a que se ganó su puesto al ser el monarca futbolístico en los Emiratos Árabes Unidos, el país anfitrión. Por este motivo tuvo que atravesar una fase previa de dos partidos antes de toparse con el campeón Sudamericano. Ahora, y con toda la carga física que esto conlleva, alzarse con la gloria lo catapultaría al plano de lo heroico.

Ya en su choque contra el elenco riverplatense mostró sus puntos fuertes y debilidades. El tándem Caio-Shiotani-Berg, tres de los cinco extranjeros del plantel, fue lo más destacado junto con el arquero Khalid Eisa. Pero las fragilidades en defensa fue la contracara, y no puede fallar otra vez si quiere tener chances frente al equipo de Luka Modric y compañía. En sus tres partidos, el Al Ain convirtió 8 goles y sufrió cinco en contra.

En frente tendrá a un coloso mundial. Real Madrid, que sin tener una temporada brillante, cumplió con creces frente al Kashima y puso en la mesa su mote de candidato natural para llevarse todo. No solo la diferencia de jerarquía está del lado de la Casa Blanca, sino que los antecedentes terminan por ser el otro sustento para creer en un desenlace predecible. Desde que se instauró el nuevo formato en el año 2005, solamente dos equipos no pertenecientes a UEFA se alzaron con la copa (Internacional de Porto Alegre y Corinthians).

Para sumar estadísticas a su favor, los madrileños son, junto con el Barcelona, el equipo que más veces se llevó el título a su país. Sin tener en cuenta la el antiguo sistema de definición, los Merengues tienen tres en sus vitrinas. Además, en el plantel actual tienen a dos jugadores que conforman la tabla de goleadores históricos. Gareth Bale con 6 tantos y Karim Benzema con 3. Todo está por definirse. ¿Pesará la lógica o el fútbol será la dinámica de lo impensado?