Luego de la finalísima ganada frente a Boca Juniors 3-1 en Madrid (5-3 el global) por la Copa Libertadores 2018, River Plate se entrena con miras al primer objetivo en el presente Mundial de Clubes, que saldrá de Esperance de Túnez o Al Ali de Emiratos Arabes (que ya venció por penales al Team Wellington de Nueva Zelanda). De pasar de ronda, en la final podría chocarse con el Real Madrid, o bien con Chivas de Guadalajara o Kashima Antlers, que se enfrentan en la otra semifinal.

Con un plantel motivado, el Millonario espera aprovechar esta oportunidad, ya que en 2015 había vencido por la mínima diferencia al Sanfrecce japonés con gol de Lucas Alario en el último minuto de partido de la semi, y con Marcelo Barovero como figura, para luego caer con mucha claridad ante el Barcelona de Lionel Messi por 3 a 0.

Será la segunda participación en este certamen del equipo que conduce Marcelo Gallardo, ya que este formato de torneo arrancó en 2000, cuando el Corinthians enfrentó y venció al Vasco Da Gama. En cuanto a equipos argentinos, aún nadie pudo festejar ya que Boca perdió ante el Milan en 2007, Estudiantes de La Plata cayó frente al Barcelona en 2009 y San Lorenzo hizo lo propio frente a un destacado Real Madrid, antes de que River viera la derrota ante el Barsa.

Antes de aquél año, se jugaba la Copa Intercontinental que enfrentaba directamente al campeón de la Copa Libertadores con el de la Champions League. El Millo tuvo dos oportunidades de alzar la copa, primero cuando chocó con el Steaua Bucarest rumano en 1986 y lo venció en Tokio, Japón, 1 a 0 con gol del uruguayo Antonio Alzamendi, y luego en la derrota ante la Juventus de 1996, por 1 a 0, con tanto de Alessandro Del Piero.

Luego de perder ante el Barsa en 2015, River se encuentra en un buen momento y quiere aprovechar que en el presente formato de Libertadores, al finalizar el torneo en diciembre, el equipo campeón mantiene por lo pronto el plantel que la ganó. Encima, enfrentaría (si llega a la final) a un Real Madrid que viene de capa caída, ya que cayó ante el CSKA de Moscú por Champions 3 a 0 y el equipo, que no luce, marcha cuarto en el torneo local detrás del Barsa, Sevilla y Atlético Madrid. Además, el Merengue ya no tiene en su plantel a Cristiano Ronaldo, gran figura que lo llevó a conquistar la orejona en tres oportunidades seguidas. Claro que individualmente, con jugadores como Gareth Bale o Luka Modric, el equipo que hoy conduce Santiago Solari, argentino ex River, tiene con qué. ¿Qué pasará de acá en adelante en el Mundial de Clubes de Abu Dhabi?