Atlético Paranaense le ganó la final de la Sudamericana a Junior de Barranquilla y sumó su primer título internacional. El encuentro finalizó 1-1 en los 90 minutos y en el tiempo suplementario con goles de Pablo Felipe para los locales y Teo Gutiérrez para El Tiburón, por lo que el partido pasó a definirse por penales, en donde los de Tiago Nunes salieron victoriosos por 4-3.

En los primeros minutos de esta primera parte, era el equipo local el que se adueñaba de la posesión de la pelota y tenía más iniciativ. Estuvo metido atrás, aunque de a poco, Junior empezó a emparejar el partido y a responder a los ataques de Atlético Paranaense y se presentó un encuentro con mayor dinamismo con chances para ambos, aunque el conjunto brasilero continuaba siendo superior.

La superioridad en el juego se iba a confirmar en el minuto 26, cuando Pablo Felipe puso a Atlético Paranaense arriba en el resultado global de la final. El jugador del equipo brasilero definió al palo derecho del arquero tras quedar mano a mano a partir de una gran habilitación que nació desde un pase filtrado, y así el equipo dirigido por Tiago Nunes firmó el 1-0 en el partido y el 2-1 en el global.

En los minutos posteriores al gol, los locales se replegaron con dos líneas de cuatro cerrándole los espacios al rival, mientras que el equipo de Barranquilla, a pesar de controlar la pelota, no tenía muchas ideas a la hora de atacar ni tampoco lograba sorprender para romper la defensa. Con el paso de los minutos, el equipo de Teo Gutiérrez y compañía empezó a mostrar una mejor cara que su rival en el juego, aunque esto no alcanzó para empatar y terminó los primeros 45 minutos abajo en el resultado pero evidenciando sus intenciones de lograr el gol.

En el segundo tiempo, Atlético Paranaense salió con un juego que sorprendió a su rival sin meterse atrás y siendo más agresivos en el juego para conseguir otro gol, lo que generó que los locales vuelvan a ser el equipo dominante en el partido.

El equipo visitante ya empezaba a mostrar síntomas de mejora después de un arranque complicado del complemento y, en el minuto 57, finalmente el Tiburón llegó al empate. La jugada del gol nació desde un tiro de esquina, y un primer cabezazo terminó siendo desviado por Teo Gutiérrez de cabeza para firmar el 1-1 y poner las cosas como estaban en un principio.

A pesar de haber encontrado el empate, Junior continuó buscando el gol y cada vez estaba más cerca de concretar lo que era su segundo gol pero no lograba aprovechar lo suficiente algunas situaciones claras que tuvo, lo que permitió que el partido siga hasta el tiempo suplementario con el empate en el resultado.  

En la primera parte del tiempo suplementario, al igual que en el arranque de las otras etapas, fue al equipo brasilero al que se lo observó con un mejor posicionamiento en el campo de juego y generando más que Junior. Pero con el paso del tiempo, el equipo colombiano empezó a mejorar y a emparejar el juego creando situaciones de gol aunque ninguno de los dos logró finalizar con eficacia sus intentos.

En los primeros minutos del segundo periodo del suplementario, Santos, arquero de Atlético Paranaense, le cometió penal a Yony Gonzáles, un penal que fue ejecutado por Jarlan Barrera y que se fue por encima del travesaño para dejar todavía con vida al equipo local.

Con un dominio cambiante al igual que a lo largo de todo el partido, la historia finalizó en empate por lo que la final de la Copa Sudamericana se tuvo que definir desde los 12 pasos, instancia en la que ganó Atlético Paranaense por 4-3.

El equipo de Nunes, a partir de coronarse en la Copa Sudamericana, accedió a otra final internacional; se trata de la Recopa Sudamericana, en donde deberá enfrentar a River Plate, el último campeón de la Copa Libertadores, y buscará seguir haciendo historia.