00:25
Compartir
jueves 6 de diciembre de 2018

Igualados al desquite

Junior y Atlético Paranaense empataron 1-1 en el cruce de ida correspondiente a la final de la Copa Sudamericana en Barranquilla y definirán el 12 de diciembre el certamen. Los goles del encuentro fueron marcados por Pablo Felipe para el elenco brasileño y Yoni González el Tiburón.
Junior lamenta su falta de acierto

Durante los primeros minutos de juego los dos equipos se midieron entre sí y ninguno se animó a meter la puntada para dañar a su adversario. Se prestaron la pelota y por la mitad de la cancha, lejos de las áreas, se desarrolló la mayor parte de juego. Sin embargo, a partir de los 25 Junior creció y consiguió hacer pesar la localía, ya que mayormente por pelotazos cruzados y con la llegada de muchos jugadores a zona ofensiva, se aproximó al arco de Atlético Paranaense, pero le faltó claridad para generar peligro.


La más clara fue a los 28 para Junior con Luis Díaz como protagonista, que improvisó una pirueta tras un control que le quedó alto pero el remate se fue desviado. Con los minutos, el conjunto cafetero acorraló a su rival y lo ahogó, logrando imponer condiciones. No obstante, salvo la ocasión recientemente mencionada, no pudo inquietar al arquero Santos.


El final del primer tiempo le vino bien a Paranaense, que aguantó la embestida de su rival y comenzó mejor el complemento. Apenas un minuto de juego para la más clara, mediante un córner que derivó en un cabezazo de Leo Pereira apenas afuera. 


Sirvió como advertencia de lo que vendría a los 50. Los de Curitiba encontraron espacios y salieron rápido de contragolpe con la conducción de Nikao, que filtró un pase al ras del césped para Pablo Felipe, que mano a mano frente a Sebastián Vieira, no falló y acomodó el balón en el primer palo.


De todas formas, Junior estuvo lejos de achicarse ante la adversidad y solo demoró dos minutos en igualar las acciones. Jonathan cerró malhacia adentro y la pelota le cayó a James Sánchez. El extremo la bajó y Yony González, de media vuelta y de primera, hizo delirar al público local. 


A los 70 minutos, los de Barranquilla tuvieron dos chances enormes para dar vuelta el resultado, pero las desaprovecharon. La primera fue por una salvada en la línea luego de un cabezazo y la segunda fue en la continuidad de la jugada, por un penal que el árbitro sancionó correctamente luego de una infracción de Rony sobre Germán Gutiérrez. El encargado de ejecutarlo fue Rafael Pérez que sacó un misil que se estrelló en el travesaño.


Sobre la hora, el Tiburón contó con una última oportunidad con un remate potente de Jarlan Barrera de media distancia, pero Santos estuvo firme y volando la sacó abajo. Pese a haber hecho más méritos que su rival, Junior deberá conformarse con el empate para viajar a Brasil a disputar el desquite, que será el 12 de abril en Curitiba.