Todo el mundo River tenía la cabeza puesta en la vuelta de la final de la Copa Libertadores. Por eso, para enfrentar a Gimnasia por la fecha 14 de la perliga, el Millonario salió a jugar con suplentes.  Y le dio resultado ya que derrotó al Lobo con 3-1. Rafael Borré y Matias Moya marcaron para los de Marcelo Gallardo, mientras que Matíass Gómez había descontado para los de Pedro Troglio.

El partido arancó parej con ambos tratando de tomar la iniciativa. River era más claro al momento de atacar al aprovechar los pases entre líneas. A los 7 de esa primera parte, Julián Álvarez aisistió a Borré quien atacó al espacio y definió a un costado para abrir el marcador. A partir de ahí, el Millonario manejaba la pelota con traquilidad ante un Lobo que tenía una defensa que no achicaba y estaba lejos de los volantes. Pese a eso, los de  de Troglio apostaban al pelotazo largo para Jan Hurtado quien con mucho empuje lograba inquietar a Germán Lux.

Con el correr de los minutos, River dejaba en claro la diferencia de jerarquía contra los de Troglio quienes estaban muy desacoplados. Esa falencia fue aprovechada por Cristian Ferreyra quien eludió a los centrales, y al ingresar al área le cometieron penal, pero Borré estaba atento para empujar el balón y poner el segundo. El partido, a esa altura, era un monólogo de los sde Gallardo, quienes por momentos trasladaba demasiado la pelota. De esa forma, se fueron al entretiempo con los dos goles de ventaja.

En el complemento, el Millonario manejaba el balón y,al igual que en lal primera parte, buscaba los pases entre líneas para Borré y Álvarez. A los cuatro minutos el Lobo llegó al desxuento tras una jufada llena de polemicas: Primero pedían una falta de Hurtado, y luego que el cabezazo de Gómez, con el arco vacío, no había entrado. Luego del gol, en River aparecieron los errores y las imprecisiones y la fricción se hizo presente. Ante este panorama, el conjunto del Bosque se desenvolvía mejor.

Con el correr de los minutos, el partido era trabado y las asociaciones brillaban por su ausencia. Los volantes de River chocaban contra la marca del Lobo y no podían generar jugadas de ataque. En el cierre del partido, Gallardo movió el banco para darle frescura al equipo ante un rival que estaba agotado. De esa forma, tras un contragolpe, Moya quedó mano a mano con el arquero y puso el tercero para sellar la victoria por 3-1.

Con este resultado, River alcanzó los 19 puntos en la Superliga. La próxima fecha que debería disutar ante Central uedpo postergado debido a la final de la libertaores. Por su parte, Gimnassia sumó su cuarta derrota en el toorneo y en la sigugeinte jornada jugara annte Huracán.