Parecía imposible. Gremio ganaba 1-0 en Porto Alegre y River tenía que hacer dos goles para alcanzar la clasificación y el pasaje directo a la final. Los jugadores del conjunto brasileño intentaron entorpecer el juego, deteniéndolo ante cada oportunidad, para dejar que el reloj corra y los jugadores del Millonario se enfríen. Sin embargo, River no cesó la búsqueda y consiguió revertir la serie con los goles de Rafael Santos Borré y Gonzalo Martínez.
River disputará una nueva final, la segunda desde que Marcelo Gallardo está a cargo de la dirección técnica del equipo. Con la nueva chance de jugar la ronda decisiva, el conjunto de Núñez llegó a la sexta definición, alcanzando a San Pablo y Nacional de Montevideo. Sus antecedentes marcan tres triunfos y dos caídas.
La primera se dio en el año 1966 y el rival fue Peñarol. En aquel entonces, no contaba la diferencia de gol para definir el resultado, por lo que tras una victoria del Carbonero por 2-0 en Uruguay y una del Millonario por 3-2 en Buenos Aires, debieron jugar un encuentro decisivo en Santiago de Chile. River ganaba 2-0 pero Peñarol llegó a la igualdad y en el tiempo suplementario puso el 4-2 final que le permitió ser campeón de América.
El segundo antecedente fue diez años después, en 1976, y el adversario fue Cruzeiro.El equipo argentino contaba con Ángel Labruna como entrenador y un bicampeonato a cuestas en el ámbito local pero cayó 4-1 en Belo Horizonte, luego triunfó 2-1 en El Monumental y nuevamente en suelo chileno perdió el encuentro definitorio, ésta vez 3-2.
En el 1986 y con Héctor Veira en el banco de suplentes, River se tomó revancha y consiguió gritar campeón. El rival fue el América de Cali y sin dejar lugar a dudas, El Millonario se impuso en los dos partidos, el primero, en Colombia, por 2-1 y el segundo, en Argentina, por 1-0.
Nuevamente ante América y en 1996 River jugó su cuarta final y logró un resultado positivo. En Cali cayó 1-0 pero en la revancha los dirigidos por Ramón Díaz dieron vuelta la serie, se impusieron 2-0 y sumaron el segundo trofeo a las vitrinas del club. La última final, la más reciente. Fue en 2015 con victoria sobre Tigres. Un empate 0-0 en México pareció un resultado favorable para River que en El Monumental y bajo una torrencial lluvia se llevó la victoria por 3-0 y su tercera Copa Libertadores.
Con la victoria de ayer, El Millonario jugará su sexta definición. Hasta el momento, lleva dos caídas y tres victorias, siendo éstas últimas de manera consecutiva. Con Marcelo Gallardo como entrenador, River ganó en 40 definiciones mano a mano sobre 48 disputadas y sin dudas brindará una gran confianza de cara al duelo decisivo ante el rival de toda la vida Boca o Palmeiras de Brasil.