La entrega que tienen los futbolistas de River es indudable. Podrá jugar bien o mal, pero el carácter de los dirigidos por Marcelo Gallardo siempre está. Y esta noche en la victoria por 3-1 ante Independiente tuvo buenos pasajes de fútbol, sumado a la intensidad y presión que muestran en cada partido. Y así gracias a los goles de Ignacio Sccocco, Juan Quintero y Rafael Borré se quedaron con el triunfo ante los de Ariel Holan, que habían llegado a la igualdad por parte de Silvio Romero.
El Millonario, que jugaba con tres delanteros, acorraló al Rojo desde el inicio del partido. Era un equipo compacto que presionaba la salida de los defensores y que no dejaban pensar a los volantes rivales cuando tenían la pelota. El conjunto de Avellaneda no podía armar ni hilvanar más de tres pases seguidos. En los primeros minutos, los futbolistas de River inquietaron a Martín Campaña, quien siempre estaba bien parado. Además, se ocupaban en cubrir la subida de los laterales de Independiente.
Con el transcurso del encuentro, la presión se mantenía pero en menor intensidad y, de esa manera, el arco de Campaña no pasaba peligro. A Ignacio Fernández le costaba asociarse con los delanteros y penetrar la defensa del Rojo. Los de Holan, a su vez, tenían más espacios para circular y acercarse al área rival. En el cierre de la primera parte, los Diablos ganaron el mediocampo y comenzaron a inquietar a Franco Armani. Ante esta situación River empezó a tirar pelotazos y se olvidó del juego por abajo. Así, se fueron al entretiempo sin goles en el marcador.
En el complemento, Independiente, con el ingreso de Emmanuel Gigliotti salió a atacar desde el inicio. Pero a los dos minutos después de un acercamiento del Rojo, Scocco arrancó un contragolpe y, precisamente, el ex Newell´s, tras tocar con Borré, finalizó la jugada y puso el primero. A partir de ahí, el partido se abrió, ya que los de Avellaneda fueron a buscar el empate. Romero se lo había perdido una vez, pero en un ataque siguiente, y luego de que Armani diera rebote, igualó el encuentro.
Con el empate, River se descontroló y no tenía idea de juego, por eso Gallardo mandó a Quintero al campo. Justamente, el colombiano, tras un rebote encaró para el área, engaño con un remtae cruzado pero lo colocó al primer palo y puso el segundo del partido. Los de Holan empezaron a empujar pero sin claridad en los metros finales, mientras que el Millo se agrupó en el mediocampo con un doble cinco, y comenzaron a salir de contragolpe. Por medio de esa vía llegaron el tercer gol: Nicolás de la Cruz se tomó el tiempo y asistió a Borré, quien enganchó para adentro y metió el disparo al ángulo.
Con este resultado, el Millonario, por tercera vez en las ultcimas cuatro ediciones, jugará las semifinales ante el ganador de Gremio y Atlético Tucumán.