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miércoles 26 de septiembre de 2018

Central Córdoba espera por Boca o Gimnasia

El Ferroviario de Santiago del Estero derrotó a Brown de Adrogué por 1-0 y se metió en los cuartos de final de la Copa Argentina, fase en la que se puede medir frente al campeón de la Superliga o al Lobo platense.

Cada uno con su épica. Por el lado de Central Córdoba, los cruces previos frente a Vélez y Tigre que terminaron en batacazo fueron los pergaminos que presentó el elenco santiagueño para el cruce por los octavos de final de la competición, mientras que el equipo dirigido por el pintoresco e histórico Pablo Vicó venía de dejar en el camino a San Martín de San Juan y a Independiente.


Con la paridad como constante, ambos elencos plantearon un duelo trabado, que obligó a que los delanteros se las tengan que ingeniar para poder generar situaciones de riesgo. La primera parte sufrió la falta de profundidad y las imprecisiones gobernaron el trámite del partido. Apenas una chance de Facundo Melivilo maquilló lo aburrido, aunque el delantero desperdició su avance frente a la salida del arquero del Tricolor.


Tras el descanso, los protagonistas activaron el ritmo del juego y la cancha de Colón empezó a sentir un ambiente de definición copera. El ida y vuelta arrancó al minuto de la reanudación con un remate que Braian Guille, figura en la llave contra el Rojo, elevó por encima del travesaño.  Con un dominio compartido, las áreas empezaron a sentir las amenazas, pero fue Brown de Adrogué el que más activo se mostró en las tareas ofensiva.


Pero, como reza una máxima del inconsciente colectivo del fútbol, el equipo de Santiago del Estero que milita en el Torneo Federal A se pusieron en ventaja. "Los goles que no se hacen en un arco se sufren en el propio", reza la premisa, y los comandados por Gustavo Coleoni echaron mano para desactivar el ataque rival. Justo después de que Leandro Garate se pidiera un mano a mano, apareció por la otra costa Javier Rossi para desatar el festejo Ferroviario. El delantero, que ingresó desde el banco de los suplentes, apareció a los 17 minutos de la segunda mitad y clavó un remate esquinado.


El 1-0 fue un golpe para los de Vicó y los avivó a ir en busca de la igualdad. El impulso generó un monólogo del Tricolor, pero las errores en los últimos metros pesaron más a la hora enfrentar a Maximiliano Cavallotti, de buena tarea bajo los tres palos de Central Córdoba.


De esta manera quedó trunco el sueño de Brown de enfrentarse a Boca, ese deseo lo había expresado su entrenador después de lo que fue la histórica clasificación frente a los de Ariel Holan. y sí tendrá la chance el equipo albinegro. Con la expectativa puesta en el choque que mañana Gimnasia y Boca protagonizarán en la otra parte del cuadro, los santiagueños quieren seguir dando que hablar en la competición más federal del fútbol argentino.