En la primera parte Tigre logró hacer valer la diferencia de categoría, mostrándose como un equipo con mayor velocidad y despliegue respecto a Guillermo Brown. Además, la superioridad no fue solamente física, sino que también futbolística, ya que El Matador manejó la pelota y dispuso de las principales situaciones de gol.
Los dirigidos por Cristian Ledesma salieron decididos a ser los protagonistas del encuentro, apostaron a la tenencia y al juego elaborado para crear peligro en el arco rival. Con jugadores de buen pie en la mitad de la cancha, como Jorge Ortiz, Lucas Menossi y Sebastián Prediger, Tigre se impuso en esa zona del campo y Brown quedó en diversas oportunidades mal parado, y quien se aprovechó de ello fue el mejor jugador del campo en el partido, Morales.
Cachete recibió con comodidad y tuvo la oportunidad de pensar y desplegar su talento, siendo de lo más claro y preciso en el manejo de la pelota. Además, fue quien consiguió abrir el marcador y poner a El Matador en ventaja. A los 26 minutos, recibió un pase de Kevin Ramírez tirado a la izquierda, dentro del área. Luego, frenó, enganchó hacia adentro y sacó un remate con cara interna buscando el segundo palo, que se metió en el ángulo superior.
Tigre pudo haberse ido con una diferencia de gol mayor al descanso, dispuso de diversas oportunidades y además tuvo la chance de ejecutar un penal, sin embargo, la acción fue mal anulada por una supuesta posición adelantada. Ramírez tiro una diagonal y anticipó al arquero del conjunto de Puerto Madryn Sebastián Giovini, que terminó bajando al uruguayo ex Nacional de Montevideo.
Brown se replegó a lo largo de la primera parte, ubicándose detrás de la línea de la mitad de la cancha para iniciar allí la presión. En ataque, le faltó claridad e ideas para acechar el arco defendido por Julio Chiarini.
En el complemento el encuentro no cambió demasiado. Tigre siguió demostrando su superioridad y manejó la pelota sin complicaciones ante un adversario que se agotó con el correr de los minutos.
Encima, Guillermo Brown tuvo que disputar los últimos 25 minutos con un jugador menos, ya que sufrió la expulsión de Emanuel Moreno, que vio la roja tras barrer con dureza a Ramírez, que después de un contraataque se encaminaba hacia el arco rival.
Con la necesidad de igualar el encuentro y evitar la eliminación, el conjunto de Chubut intentó aproximarse pero no pudo generar situaciones claras. Los de Victoria, conscientes de que el resultado era corto, pudieron haberlo liquidado de contra, pero no lograron materializar sus chances. De todas formas, consiguió el triunfo final y el pasaje a la próxima ronda, en donde se enfrentará ante el verdugo de Vélez, Central Córdoba.