En el primer turno de este quinto día mundialista se cerró el grupo F. Tras este resultado, México y Suecia son los punteros del mismo tras vencer por 1-0, mientras que Alemania y Corea no sumaron puntos.

El encuentro comenzó con un claro dominio de los asiáticos, que tenían la pelota y buscaban crear situaciones con paciencia, moviendo la pelota por todo el campo, lo que fastidiaba a los jugadores suecos, en especial a su figura, Emil Forsberg. Pero la posesión cambió tras los diez primeros minutos. Suecia se acomodó en el campo y entró en partido, lo que generó situaciones de gol a partir de pelotazos a la espalda de los centrales y en las pelotas paradas.

La jugada más nítida se dio en el minuto 20, cuando tras un centro por la izquierda la pelota quedó en el área chica y dejó mano a mano a Marcus Berg con Cho Hyun-Woo, quien se lució a puro reflejo y tapó una estupenda pelota. Las posteriores jugadas llegaron luego de centros que fueron conectados por Ola Toivonen, uno de los jugadores más altos de la cancha con 1.91 metros de altura. El primero se fue desviado luego de un córner de Forsberg y, llegando al final de la primera mitad, tras un centro por la derecha de Sebastian Larsson, cabeceó y el balón se fue muy cerca del ángulo izquierdo. Así fue como terminó el primer tiempo, cortado por muchas faltas (en total hubo 25) y con una mejor imagen dejada por los europeos.

En los segundos 45 minutos hubo otra dinámica, ambos equipos buscaban el gol desde el arranque del mismo. La primera jugada fue para los suecos, cuando Forsberg intentó imitar a Philippe Coutinho ayer, abriendo el pie derecho y buscando el ángulo, pero la pelota se fue por encima del travesaño. Minutos más tarde, Corea tuvo su única chance en el partido, tras un cabezazo de Koo Ja-Cheol la pelota pegó en el lado de afuera de la red, lo que generó un erróneo grito de gol de algunos simpatizantes. Pero la apertura del marcador llegó a los 65 por la vía del penal. El árbitro, Joel Aguilar Chicas, no vio una clara falta dentro del área de Corea y debió recurrir al VAR,  lo que generó el segundo penal cobrado por la tecnología en este Mundial. Andreas Granqvist se hizo cargo del mismo y engañó al arquero coreano, una de las figuras del encuentro, y convirtió el gol del triunfo.

De esta manera, Suecia volvió a ganar en su debut mundialista luego de siete mundiales, la última había sido en el Mundial disputado en su país, en 1958. La segunda jornada del grupo F será el sábado, cuando Suecia choque con Alemania al mediodía y Corea-México se vean las caras por la tarde.