Si alguno de los dos equipos que abrían el Grupo B de la Copa del Mundo quería tener alguna chance de pasar la primera fase, debía ganar como sea este primer partido y así lo hizo Irán, que tras superar 1-0 a Marruecos, se ilusiona con hacer historia.

Los asiáticos lograron su segunda victoria en un Mundial luego de un comienzo que le fue adverso. Y es que los africanos comenzando siendo muy superiores y estuvieron cerca de conseguir la apertura del marcador en más de una ocasión. Sin embargo la suerte estuvo del lado de los "Principes de Persia" que luego de superar los primeros 25 minutos de dominio marroquí lograron salir y le pelearon de igual a igual los 20 minutos restantes.

Pese a que la primera mitad terminó 0-0 hubo al menos dos ocaciones claras por lado, haciendo protagonistas a los arqueros. Algo que no se repetiría en la segunda etapa, ya que luego de 5 buenos primeros minutos de "Los Leones del Atlas", el partido cayó en un gran declive en el cual fueron más los parones por faltas o lesiones que otra cosa.

Pero ninguno de los equipos lograba hacer daño. Los comandados por Hervé Renard intentaban con pelotazos frontales o diagonales que no terminaban en nada, luego de haber descargado bastante energia en los primeros minutos sin éxito alguno. Mientras que los dirigidos por Carlos Queiroz casi ni se preocupaban por la tenencia de la pelota, buscando solamente lastimar en contras rápidas y muy directas.

A los 95 minutos, en el último minuto adicionado, llegaría el único gol del encuentro, este sería obra del recién ingresado Aziz Bouhaddouz en contra, cuando intentó despejar un centro cerrado que fue enviado a la salida de un tiro de esquina. Luego del festejo los africanos se tiraron arriba en busqueda del empate pero ya era demasiado tarde.

Con este resultado Irán consiguió sus primeros tres puntos en esta edición de la Copa del Mundo y se prepara para luchar una plaza a la siguiente ronda a partir de la siguiente fecha cuando juegue contra España. Mientras que Marruecos intentará recuperarse de este duro golpe en su enfrentamiento ante Portugal.