Volvió la Superliga y para Banfield lo hizo con nuevo entrenador, Hernán Crespo, quién trajo un nuevo estilo de juego, lleno de presión y posesión pero que no tuvo efectividad en este encuentro. Y fue esa falta de efectividad la que terminó sentenciando el 1-1 frente a San Martín de San Juan en el estadio Florencio Solá.
El encuentro fue completamente dominado por el local en la primera mitad, tanto en la tenencia de la pelota, como en las ocasiones de gol y hasta el marcador, de hecho fue gracias a los dos primeros que a los siete minutos ya iba 1-0 el encuentro. El gol fue marcado por Juan Álvarez con un buen derechazo cruzado, luego de una larga asistencia de Renato Civelli. Este tanto le daba al Taladro la oportunidad de plantear su idea de juego algo más relajado, lo que ayudaba a que se den mejores resultados en la elaboración, tanto fue así que acabó la primera mitad con el 70% de la posesión y con casi un 80% de efectividad, aunque el resultado seguía siendo 1-0 y eso preocupaba al entrenador.
Muy importante fue la actuación de Luis Ardente durante toda la primera mitad y los primeros quince de la segunda para que el verdiblanco no amplié diferencias, algo que le costaría muy caro en la segunda mitad. Además el ingreso de Claudio Mosca fue fundamental en defensa para que el Santo Sajuanino no sufra tanto por su costado izquierdo, mientras que Humberto Osorio fue un cambio revulsivo clave en el ataque, para sacar a Banfield de su cómoda postura defensiva.
Desde el ingreso de Osorio el encuentro empezó a mutar y más aún con los cambios del Taladro, que lejos de ser una solución no se asentaron de la misma forma que los jugadores que sustituyeron. Pese a ello el gol del empate marcado por Pablo Palacios llegó en una jugada llamativa, ya que previo al cabezazo del centrodelantero hubo un choque entre el arquero Iván Arboleda y Civelli que dejó mareados a ambos y derivó en un cabezazo hacia atrás del central y una mala salida del colombiano, dejando al delantero solo y con portería vacía para definir a placer.
Con el empate el encuentro comenzó a hacerse más de ida y vuelta, ya que el local, pese a notarse sumamente agotado iba por amor propio y la visita se refugiaba y salía rápido de contra. La última del partido fue un gol Agustín Fontana, tras una asistencia de Emanuel Cecchini pero acabó siendo bien anulado por la asistente Gisela Trucco debido a que el centrodelantero se encontraba en off-side.
Con este empate Banfield que en la próxima jornada visitará a Talleres perdió una gran oportunidad de meterse en los puestos de copa. Mientras que San Martín suma un importante punto en su pelea por la permanencia, algo a lo que seguirá apuntando en la próxima jornada cuando reciba a Estudiantes.