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domingo 23 de diciembre de 2018

De las dudas a la gloria eterna

El equipo de Marcelo Gallardo no tuvo un buen comienzo de temporada, pero cerró de la mejor manera el año ganándole a su eterno rival en la finalísima de Copa Libertadores disputada en Madrid.
River cerró su participacion en el Mundial de Clubes tercero. Fuente: cba24

El año de River Plate ha ido de menor a mayor, comenzando con momentos difíciles porque no encontraba el rumbo y estaba en los últimos puestos de la Superliga que ganó Boca Juniors en la primera mitad del año. A su vez consiguió finalizar la temporada alcanzando la gloria, que fue la tan ansiada final de Copa Libertadores de América, disputada en Madrid, frente al clásico rival.


La obtención de la Copa Argentina 2017 le dio paso para jugar la Supercopa Argentina en marzo también contra Boca, que había obtenido el campeonato argentino. Fue la segunda final disputada entre ambos en la historia y River se iba a quedar con aquél partido por 2-0, sorprendiendo porque en ese período el equipo no mostraba su mejor versión futbolística y el Xeneize sí.


A mitad de temporada, ya con un campeón consagrado en la liga local, el equipo de Marcelo Gallardo terminó en el puesto 9 de la Superliga, decorando un primer semestre malo, salvo por la adquisición de la Supercopa en la provincia cuyana. Con la primera parte caducada, la Banda no entró en la Copa Libertadores 2019 pero sí en la Copa Sudamericana.


De alguna manera, River, tenía la obligación de conseguir el cupo que lo depositara en la próxima Libertadores por la necesidad económica y deportiva de todo equipo grande de jugar ese certamen. Para ello, estaban las posibilidades de coronar el tricampeonato de Copa Argentina y/o ganar la Libertadores que meses más tarde lo encontraría en la final con Boca. 


Por la Copa Argentina quedó en el camino en semifinales con el actual subcampeón de la competencia, Gimnasia y Esgrima de la Plata, al haber jugado un mal partido y definiendo la serie por penales. Por otro lado, el Millonario ya estaba focalizado en lo que iba a ser la segunda final de libertadores, que se desnaturalizó por lo que pasó en el Monumental cuando se apedreó el micro que llevaba a la delegación de Boca.


Después de idas y vueltas, la segunda Superfinal se jugó en Madrid, algo ilógico porque esta Copa reúne a equipos de Sudamérica. Así y todo, se disputó y River cerró su temporada ganándole a su eterno rival por 3-1 en tiempo suplementario, conquistando América por cuarta vez en su historia.


Por otra parte, este trofeo da la posibilidad de disputar el Mundial de Clubes que esta vez se realizó en Abu Dhabi. El conjunto de Gallardo comenzó en semifinales ante el pobre Al-Ain, cayendo inesperadamente en esa fase y dejando pasar la chance de una final contra el Real Madrid. De este modo, se despidió en tercer lugar cuando le ganó al Kashima Antlers por 4-0.


El balance del año para River terminó siendo muy distinto a lo que se veía venir en los primeros meses del 2018. Dos copas obtenidas ante Boca y y una de ellas siendo la cuarta Copa Libertadores en la historia del club, seguro le dejen muchos recuerdos más que felices a sus hinchas por mucho tiempo.