Con el cierre del año a la vuelta de la esquina también se hacen presentes las etapas decisivas de los torneos. Este fin de semana será turno de la categoría más tecnológica de Argentina de coronar a su monarca. Facundo Ardusso, al mando de su Renault Fluence, y Agustín Canapino, representando los colores de Chevrotel, se volverán a ver las caras para decidir quién se adueña de la gloria.

El piloto del rombo tiene la matemática su favor: su buen desempeño en los 200 kilómetros de Buenos Aires, cita en la que se llevó la victoria y aprovechó el abandono de sus principales escoltas para conseguir su segundo éxito del 2018, lo catapultó a la punta de la tabla y le permitió sacar 23 unidades de ventaja con respecto al arrecifeño, único con posibilidades de pelearle en el mano a mano. Con el respaldo del equipo Renault Sport, recientemente laureado con el título entre las estructuras, el santafesino agiganta sus chances.

La tranquilidad del líder le juega a favor a la hora de hacer cuentas. Depende de sí mismo para firmar su bicampeonato y los dos panoramas más simples para entender cómo puede darse el desenlace son un guiño a contemplar. En el caso de quedar quinto o mejor, Ardusso festejará sin importar en qué puesto culmine su rival, mientras que en el otro contexto, que el de Las Parejas no sume a causa de un abandono, lo exige a Canapino a ser cuarto como mínimo.

Pero el escenario cordobés tiene algo para aportar en la definición. El autódromo de Alta Gracia marca su estadística propia, aporta en el asunto y beneficia a Canapino, ya que el Titán es uno de los más ganadores en el Cabalén. El de Chevrolet se impuso en cuatro oportunidades, tres de las cuales fueron durante la etapa de los motores v8 de la categoría. Vio la bandera a cuadros en desde el primer lugar en 2011, 2013, 2016 y 2017. Por su lado, Ardusso, pese a haber festejado el logro del campeonato en esta plaza en 2017, nunca pudo salir con el éxito en la carrera final.

Otro punto a tener en cuenta será el rol que cumplan los compañeros de equipo de ambos contendientes. Acá Renault puede sacar una leve ventaja al tener de su lado a Leonel Pernía entre sus filas para cuidarle las espaldas al candidato. Si bien el de Tandil se quedó en las puertas de la pelea por la copa, puede ser determinante si se decide a jugar del lado de su socio en la marca. Con altos y bajos, Pernía resumió un desempeño más sólido en comparación a Bernardo Llaver, segundo piloto de Chevrolet, algo que puede terminar resultar clave a la hora del vuelta a vuelta.

Todo está por verse y no será un fin de semana más. La categoría acomodó los horarios de las tandas clasificatorias del sábado para que no se pisen con el desarrollo de la finalísima entre Boca y River. A las 15.35 del sábado tendremos el poleman y el domingo a las 12.00 se larga la final.