Falta una semana para el inicio de los Juegos Olímpicos de la Juventud y el Beach Vóley quiere dar la sorpresa. Tras una gran preparación en la cual lograron un importante roce internacional, Brenda Churín, una de las representantes argentinas en esta cita, confía que puede igualar o mejorar el bronce que obtuvieron Santiago Aulisi y Leo Aveiro en Nanjing 2014.
Churín proviene del Vóley tradicional, pero siempre le interesó la rama del Beach, ya que estaba presente en el ámbito familiar. "Con el correr de los años jugué algunos torneos junto a mi hermana y con mi papá de técnico", aseguró la platense.
Al ser un deporte dinámico y divertido, Churín no dudó un segundo cuando le llegó la propuesta de practicarlo. Sin embargo, junto a Delfina Villar comenzó a jugar de casualidad en un torneo en Entre Ríos en el cual salieron campeonas."Eso llamó la atención de los entrenadores y de la gente que estaba metida en el proyecto de Buenos Aires", dijo Brenda.
Si bien la jugadora de Estudiantes de La Plata sabía que por la categoría podía representar al seleccionado, nunca se imaginó que iba a estar presente en una cita de tal envergadura.
De cara a los Juegos, junto a Villar, realizaron una preparación muy intensa que involucró el Mundial sub 19, en el cual finalizaron entre las 16 mejores. "Tuvimos la posibilidad de tener mucha competencia, en diferente niveles y categorías", asegura Churín. El roce internacional les permitió darse cuenta en qué nivel estaban y que necesitaban para mejorar.
El cierre de esa preparación fue hace un par de semanas en California. Allí entrenaron un mes entero de la mejor forma y jugaron con parejas de muy buen nivel para llegar a punto a Buenos Aires 2018.
Precisamente, el ENARD fue partícipe importante para esa preparación. "Nos están apoyando un montón, tanto en los viajes como en las becas para poder cubrir los gastos que necesitamos al entrenarnos en alto rendimiento", dice la jugadora de Estudiantes.
El hecho que los Juegos se realicen en la Argentina puede generar sentimientos encontrados. "Por un lado, está muy lindo que acompañen familiares y amigos, pero por el otro, es difícil no sentir una presión por jugar acá", afirmó Brenda. Además, agregó que va a ser muy emocionante representar a los colores nacionales.
A pesar que será una competencia muy reñida, irán con la ilusión de conseguir una medalla y más estando en Buenos Aires. Sin embargo, Churín aseguró que no hay tanta diferencia con las europeas o las norteamericanas. "La parte física es una ventaja para ellas, pero creo que las argentinas tenemos mucho más talento", aseguró Brenda.