La ilusión de las Gigantes llegó a su final, pese a la importancia de volver a jugar un Mundial para el básquet femenino tras 8 años. La Argentina perdió con Nigeria 75-70, y finalizó 4º en el grupo B.

La diferencia física pesó en todo el torneo, y no fue distinto el caso hoy, ante las vigentes campeonas africanas. La diferencia en los rebotes, sobre todo en los ofensivos (24 contra 11), terminó pesando.

En el inicio, las nigerianas comenzaron desordenadas y con muchas pérdidas, pero las dirigidas por Cristian Santander comenzaron arrastrando el muy bajo porcentaje de tiros de campo, con lo que arrancaron en desventaja. Con buenos aportes de Ornella Santana (5 puntos hoy) primero y Victoria Llorente (19) sobre el final del primer período, terminaron 19-13 abajo ese cuarto después de haber estado 17-7.

En el segundo cuarto, la defensa siguió siendo intensa para las Gigantes, y Llorente empezó a pesar en la pintura en ataque, encabezando la remontada para que hacia la mitad de este período la Argentina retome la ventaja que supo tener en los primeros instantes de juego. Pero sobre el final, sus rivales aprovecharon para reponerse e irse al descanso arriba 32-29.

Ya en el segundo tiempo, el partido empezó a ser de ida y vuelta, y mientras que Promise Amukamara (16 puntos), Aisha Mohammed (12) y Ezinne Josephine Kalu (12) seguían firmes en la ofensiva, en la Argentina Melisa Gretter, máxima anotadora del encuentro con 21, empezó a hacerse difícil de defender. Además, la base bajó 7 rebotes y dio 4 asistencias, teniendo una actuación bastante completa.

Sobre el final, Nigeria se pudo escapar y ganar el partido. Las lágrimas en los ojos de las jugadoras argentinas mostraban el dolor por la derrota y la eliminación, pero deberá entrar en el balance el hecho de volver a haber jugado el Mundial. Ahora, a seguir creciendo.