Por la quinta fecha del campeonato, el conjunto de La Ribera sacó adelante un partido difícil en La Paternal y se puso a tiro en la tabla. Con un tanto de Carlos Izquierdoz, los de Guillermo Barros Schelotto volvieron a sumar fuera de casa, algo que no conocían desde febrero de este año. Un triunfo justo antes del comienzo de una seguidilla clave.

Un duelo con condimentos de sobra. A una previa caliente, a causa de la presencia de Carlos Tévez entre los once, rodeado por la polémica de su regreso al estadio Diego Armando Maradona tras su incidente con la lesión de Ezequiel Ham, se sumó una copiosa lluvia que puso una atmósfera friccionada.

Con determinación desde el arranque, Boca impuso las condiciones iniciales. La movilidad de los protagonistas en ofensiva fue una de las claves para que la visita se asome en reiteradas oportunidades al arco custodiado por Lucas Chaves. Darío Benedetto y Sebastián Villa se convirtieron en las principales salidas para los ataques de los de Guillermo, pero la falta de puntería mantuvo las acciones en cero.

Apenas pasado el primer cuarto de hora se dio una de las polémicas de la noche. Una mano grosera de Kevin Mac Allister en el área después de un centro del extremo colombiano no fue advertida por el árbitro del partido y desató las protestas del banco xeneize. 

Lejos de frenar el ritmo de ida y vuelta, la visita golpeó desde una vía poco frecuente en su repertorio. Izquierdoz cabeceó en un córner para marcar el único tanto en La Paternal, en lo que fue su debut goleador en torneos oficiales con la camiseta del campeón defensor de la Superliga. Además, volvió a convertir después de cuatro años. Su último grito fue en 2014 con los colores de Lanús.

La ventaja en el bolsillo le pesó a Boca y fue de mayor a menor. El Bicho creció en parte por la urgencia de ir en busca del empate, mientras que su rival perdió la brújula en el mediocampo. Ya en el complemento, Tévez y Pablo Pérez decayeron en su juego y profundizaron la incertidumbre en el xeneize.

El correr del reloj le hizo un favor a los dirigidos por Guillermo que festejaron su primer triunfo como visitante del torneo, algo que no conseguían desde febrero cuando derrotaron en el Florencio Sola a Banfield. Además, no fue una victoria más, ya que La Paternal no es una plaza fácil para Boca: en los últimos 10 años sólo consiguió imponerse en tres ocasiones. 

Cuando peor la pasó la visita, apareció Esteban Andrada. Con presencia bajo los tres palos, el ex granate salvó lo que pudo haber sido el empate y se convirtió en una de las figuras de la cancha.

De esta manera, el Xeneize escaló al tercer escalón de la tabla y se pusieron a una unidad del líder. A la espera del duelo de Racing, los de La Ribera quedaron como escoltas de Atlético Tucumán. En el ámbito internacional tendrá su próximo compromiso (Cruzeiro por los cuartos de la Libertadores) para luego chocar con River en la sexta jornada de la Superliga.

Por su lado, Argentinos sufrió su segunda caída del campeonato y se estancó en la posición 16º de la tabla con 5 unidades. En el horizonte del Bicho está la visita a Tucumán para enfrentarse a San Martín.