Otra carrera de ensueño para el piloto británico, que consiguió su segundo triunfo en siete días, y se aferró a la cima de la tabla. Partiendo desde la pole y aprovechando una solvente manejo de los compuestos de neumáticos por parte del equipo Mercedes, el campeón defensor empieza a inclinar la balanza a su favor.
Gracias una excelente jornada clasificatoria, Hamilton se aseguró el lugar de privilegio a la hora de la partida. El primer lugar de la parrilla, codiciado frente a la paridad que se vive entre las estructuras más poderosas de la categoría, le dio la tranquilidad para administrar la diferencia con respecto a sus rivales. Pese a que Valtteri Bottas, no pudo contener el ataque de Vettel en el arranque, el puntero no corrió ningún riesgo y sacó a lucir todo su talento para pisar fuerte en suelo húngaro.
Las estrategias cumplieron un rol protagónico en lo que fue la película de la victoria de Hamilton. Por vías diferentes a la hora de elegir el compuesto de neumáticos para afrontar el sprint medio de la competencia. La elección de Ferrari pasó por poner al alemán a trabajar con parciales largos y por otro lado Raikkonen se mantuvo siempre a tiro con dos paradas en boxes. En cambio, Mercedes apeló a tramos de velocidad con las ultra blandas para aprovechar la ventaja inicial.
En el equipo Red Bull, tercero en discordia en una temporada dominada por las dos escuderías más influyentes del presente, tuvo buenas y malas: Daniel Ricciardo completó una sobresaliente actuación y arribó cuarto, mientras que Max Verstappen debió abandonar por problemas mecánicos en lo que fue su cuarta deserción de lo que va del 2018. El australiano partió 13 y remontó hasta que un toque con Bottas sobre el final obligó al finés a cederle su lugar para evitar una penalidad.
Sin resto para correr el líder, las Ferraris de Vettel y Raikkonen se quedaron con las ganas de dar el zarpazo para evitar que Hamilton le saque más diferencia en el campeonato. Con un largo receso de un mes por venir, y de cara a la segunda parte de la temporada, la ventaja del británico empieza a esperanzar al piloto del equipo que comanda Toto Wolf. Los 24 puntos representan casi una carrera completa de ventaja, se volverán a ver las caras el próximo 26 de agosto en el mítico Spa-Francochamps de Bélgica.
Así quedó el campeonato: