El escocés Andy Murray, uno de los cuatro integrantes del “big four” y ex N°1 del mundo, anunció que se retirará del tenis. El británico, quien tuvo la enorme mala suerte de compartir época con tres de los mejores tenistas de la historia, dijo que intentará jugar su último torneo en Wimbledon, Grand Slam que ganó en 2013 y 2016. A continuación, un repaso de lo mejor de la de carrera de uno de los más grandes estrategas de la historia del tenis.
2003, 2004, 2005, 2006 y 2007: La llegada a la élite.
El menor de los Murray (tiene un hermano mayor llamado Jamie que se dedica al dobles) sumó sus primeros puntos como profesional en 2003, con menos de 16 años. Aquella temporada terminó en la ubicación 540 del ranking, pero a partir de allí nunca paró de avanzar. Al año siguiente escaló más de 100 lugares, para terminar 411.
Pero en 2005 llegó el año de la explosión. Con solo 18 años tuvo una temporada sobresaliente y llegó a meterse en el top 100 por primera vez en su carrera (terminó 63) y comenzaba a ilusionar a sus compatriotas, quienes se habían deleitado con el tenis de Tim Henman pero ya estaba en el ocaso de su carrera y no le había podido regalar un Grand Slam a los suyos.
Un año después, el 19 de febrero de 2006, Murray obtuvo su primer título ATP en San José, Estados Unidos (finalizó aquella temporada en el top 20). El escocés tuvo que esperar otro año para volver a ganar un torneo, donde defendería la corona en el ATP estadounidense. Pero luego de eso comenzaría a triunfar con mayor regularidad. 8 meses después se consagraría en San Petersburgo, Rusia, y terminaría el 2007 a un solo puesto del top 10.
2008, 2009, 2010 y 2011: Se forma el big four.
Hasta 2008 el tenis estaba dominado por solo dos tres tenistas: Roger Federer, Rafael Nadal y un joven Novak Djokovic, quien había logrado molestar a aquellos dos gigantes desde hacía un año. Pero luego apareció Andy Murray para entrometerse, empezar a ganar una gran cantidad de torneos y colocarse en la cuarta ubicación del ranking. El nuevo integrante del big four comenzó la temporada con un título en Doha en enero y otro en Marsella, sólo un mes después. Pero sus primeros batacazos serían sobre el final de la temporada, más específicamente en los Masters 1000 de Cincinnati y Madrid, donde se llevaría el título. Además, Murray llegó por primera vez a la final de un Grand Slam, en el US Open, donde cayó ante Federer por 6-2, 7-5 y 6-2.
Los tres años siguientes serían similares para el escocés: pudo tocar en N°3 en alguna que otra ocasión, ganó dos Masters 1000 en cada temporada, pero seguía faltándole el Grand Slam que tanto ansiaba. Solo pudo llegar a la final del Australian Open en 2010 y 2011, donde fue derrotado por Federer y Djokovic, respectivamente.
2012 y 2013: Londres y los primeros Grand Slams.
Murray comenzó el 2012 con un título en Brisbane, Australia, sin embargo una serie de malos resultados lo hacían llegar con solo ese torneo bajo el brazo a los Juegos Olímpicos de Londres, donde sería local en el All England. Pero el escocés sacó lo mejor de su repertorio y se llevó la medalla dorada con un nivel sobresaliente, venciendo en semis a Djokovic y en la final a Federer, quien llegaba muy extenuado por una final larguísima ante Juan Martín Del Potro, por 6-2, 6-1 y 6-4. Su grandioso momento sería confirmado un mes después, al ganar su primer Grand Slam en el US Open, venciendo por 6-2 en el quinto set de una dramática final a Djokovic. Finalizó el año como tercero, ayudado por la lesión en la rodilla de Nadal, quien se perdió la segunda mitad de la temporada.
El 2013 arrancó con la defensa del título en Brisbane y consagrándose dos meses después en Miami, aunque no se le pudo dar en la final de Australia ante un Djokovic que se mostraba como en el patio de su casa en aquel torneo. Pero en la gira de césped llegaría, tal vez, uno de los momentos más emocionantes de su carrera: superó en la final de Wimbledon a Djokovic (otra vez ayudado por Del Potro, quien jugó un partido de enorme intensidad ante el serbio en semis) por 6-4, 7-5 y 6-4, para convertirse en el primer británico en consagrarse en el All England desde que Fred Perry lo hiciera en 1936.
Pero por vueltas del destino, el escocés tuvo que finalizar la temporada de manera prematura por una lesión en la espalda que lo hizo ir al quirófano.
2014, 2015 y 2016: La vuelta, la Davis, Río y el número 1.
Murray tuvo un período de readaptacion tras su lesión en la espalda y logró terminar el 2014 con tres títulos en la última parte de la temporada y en la sexta colocación del ranking. Pero en 2015 llegaría un momento clave en su carrera: el 4 de mayo llegaría a su primer final en polvo de ladrillo, una superficie que le era extremadamente esquiva, y además pudo consagrarse. Solo 6 días después confirmaría su cambio en aquella superficie, venciendo en la final del Masters 1000 de Madrid al local y casi invencible en polvo, Rafael Nadal. Aquella temporada concluiría en la segunda colocación del ranking, otro Masters obtenido en Montreal, Canadá, y la consagración en la Copa Davis con él como principal protagonista.
El 2016 arrancaría con su quinta final caída en Australia, nuevamente ante Djokovic, quien se mostraba invencible y llegó a sacarle más de 8000 puntos en la clasificación luego de vencerlo también en el partido cumbre de Roland Garros. Pero justo allí comenzó la enorme remontada del escocés: título en Queen’s, su tercer Grand Slam (superando en la final a Milos Raonic) y ganando nuevamente la medalla de oro en los JJ.OO., donde venció a Del Potro en cuatro sets.
Además, Djokovic tuvo un enorme bajón tenístico luego de ganar en Roland Garros y sumó muy pocos puntos hasta el final de la temporada. Murray aprovechó la situación, de consagró en Beijing, Shanghai, Viena y Paris, y superó en la final del ATP World Tour Finals al serbio en un mano a mano para finalizar la temporada como N°1 del mundo.
2017 y 2018: Del cielo al infierno.
Murray llegaba a la temporada 2017 como flamante número 1 del mundo, en un grandioso nivel y con la ilusión de seguir sumando semanas en la cima. Pero allí fue cuando comenzó su pesadilla: el 4 de marzo obtendría su último torneo, venciendo en la final de Dubai a Fernando Verdasco, y luego se pudo observar una enorme caída en su nivel, que generaba muchísimas dudas sobre si tenía alguna lesión. Aquellas sospechas fueron confirmadas luego de Wimbledon, donde cayó ante el estadounidense Sam Querrey, cuando fue operado en la cadera.
Pasó casi un año para que Murray volviese a las canchas, hecho que ocurrió en Queen’s (en la antesala del torneo que se disputa en el All England) con derrota contra el australiano Nick Kyrgios. A partir de allí fue una seguidilla de malas actuaciones del escocés, quien nunca pudo recuperar su nivel.
Murray en números:
El escocés, nacido el 15 de mayo de 1987 en Glasgow, Escocia, acumula 45 títulos ATP en su carrera (3 Grand Slams, 14 Masters 1000, 9 ATP 500 y 16 ATP 250), un récord de 662 triunfos y 189 caídas y U$61.046.255 obtenidos en ganancias. Acumuló 41 semanas como número 1 del ranking. Finalmente, en lo que respecta a Juegos Olímpicos cosechó 2 medallas de oro (Londres 2012 y Río 2016) en individuales y una de plata, en Londres, en el dobles mixtos junto a Laura Robson. Además ganó una Copa Davis representando a Gran Bretaña en 2015.