Manchester City había arrancado con una derrota en la nueva edición de la Champions League. Y parecía que se le podía complicar la clasificación. Sin embargo, tres victorias seguidas, incluída la de la esta 4° fecha ante Shakhtar Donetsk lo depositaron en los octavos. Lyon, el otro favorito del Grupo F no pudo asegurar su clasificación a la próxima ronda ya que empató ante Hoffenheim.
El City, que tenía a Sergio Agüero y a Nicolás Otamendi, comenzó con la iniciativa a través de pases cortos y de la amplitud de la cancha. El Shakhtar, por su parte, era un equipo compacto que jugaba en 30, 40 metros y cerraba los espacios en la defensa. Pero cuando los ucranianos recuperaban la pelota, los de Pep Guardiola retrocedían rápidamente y le impedían seguir construyendo el contrataque. A los 12 de la primera parte, Bernardo Silva mandó un centro rasante, luego de atravesar a cuatro futbolistas, para David Silva, quien de frente al arco empujó el balón al fondo de la red.
Con el correr de los minutos, los Ciudadanos aumentaron la supremacía ante un rival que no podía dar más de tres pases seguidos. Mucho más fue la diferencia cuando Gabriel Jesús marcó el segundo tanto de penal. Pese a la ventaja, el equipo inglés dominaba cuando tenía el balón y presiónaba cuando no lo tenía. Así se fueron al entretiempo con dos tantos arriba.
En el complemento, el City mantenía la superioridad ante los de Paulo Fonseca. Abrían la cancha con pases cortos, seguros y esperaban el momento para filtrar el balón entre los defensores. Raheem Sterling marcó el tercer gol antes de los cinco minutos de ese segundo tiempo. La mayor parte del partido se disputaba en el campo de los ucranianos, quienes por momentos lograban salir del asedio de los ingleses.
Por si fuera poco, Jesús volvio a ampliar la diferencia por intermedio de otro penal. Con el partido ya liquidado, Guardiola movió el banco y le dio descanso a algunos de sus jugadores. En el cierre del encuentro un error en el mediocampo de los de Fonseca, le perimitió a Riyad Mahrez convertir el quinto gol. Para no dejar dudas Gabriel, ante una defensa abierta, marcó el sexto de vaselina para cerrar la goleada.
Lyon y Hoffenheim, por su parte, en la primera parte disputaban un encuentro trabado y cortado por tantas faltas. Se prestaban la pelota continuamente y ninguno lograba generar una llegada al área rival. Con el correr del partido, el equipo francés tomaba las riendas y empezaba a ser superior. Generaba jugadas de ataque y a los veinte minutos se puso en ventaja con un remate de Nabil Fekir.
A partir de ahí, el equipo alemán buscaba el descuento pero dejaba espacios en la defensa. De esa manera, Alvaro NDombele amplió la diferencia para el conjunto francés. Con el correr de los minutos, los de Bruno Genesio le bajaron el ritmo al partido con el control de la pelota. Así, se fueron al entretiempo con la ventaja de dos goles.
En el complemento, los alemanes empezaron a presionar al Olympique en busca del descuento. Tal es así, que con varios remates lograban inquietar al arco custidiodado por Antonhy Lopes. Pero, les faltaba claridad y con el correr de los minutos el Lyon salió de ese empuje de su rival. Sin embargo, a los veinte, Kramaric, con un disparo desde afuera del área, metió el descuento.
A partir de ahí, el equipo de Julian Nagelsmann iba al ataque sin demasiadas ideas, pero descuidaba el fondo. Por eso el conjunto de Genesio buscaba aprovechar un contragolpe para ampliar la diferencia. Los alemanes, que empujaban con ataques un poco deslucidos, llegaron al empate a través del tanto de Kaderabek. En el cierre, Hoffenheim lo pudo haber ganado pero el cabezazo de Joelinton se fue afuera y ambos equipos quedaron igualados.
De esta manera, el grupo F ya tiene a los Ciudadanos, con 9 puntos, clasificados a la siguiente ronda. Por su parte Lyon, con 6 unidades, tiene un pie y medio en los octavos. Aunque a falta de dos jornadas tanto Hoffenheim, con 3 y Shaktar, con 2, todavía tienen chanes de pelar por el segundo lugar.