Cleveland Cavaliers también demostró que puede hacerse fuerte como local. En el Quicken Loans Arena, superó a Boston Celtics por 116-86 y descontó la serie de las Finales de la Conferencia Este que ahora están 2-1 a favor de los Celtics.
De arranque, los Cavaliers establecieron una ventaja que nunca dejaron de ampliar. Su arranque demoledor de 20-4, que terminó siendo 32-17 en el primer cuarto, se debió a una defensa agresiva que forzó muchos tiros incómodos rivales y también pérdidas, así como la aparición de George Hill con 11 puntos en los primeros 12 minutos (tenía 8 en los dos encuentros anteriores completos).
Después de que se haya nivelado un poco el segundo período, el local sacó todavía un poco más de ventaja, y LeBron James ya era figura casi excluyente. Terminó con 27 puntos (19 en la primera mitad), 5 rebotes y 12 asistencias, y fue el único de la noche en anotar más de 20.
Poco pudo hacer Boston para intentar ponerse en partido. Un pobre 39% en tiros de campo acompañado del 27% en triples los dejó fuera de la discusión demasiado pronto, y perdieron la oportunidad de poner al campeón defensor del Este contra las cuerdas.
Estas dos franquicias se volverán a enfrentar el lunes desde las 21.30, nuevamente en casa de Cleveland, que buscará igualar la serie. Brad Stevens buscará trabajar con sus jugadores para que dejen pasar este mal partido e intenten acercarse a las Finales de la NBA, mientras Houston Rockets y Golden State Warriors también siguen peleando por seguir con vida.