Los mendocinos dejaron en el camino a Banfield y se medirán con Rosario Central, que ayer dio cuenta de Boca, en los cuartos de final de la competición más federal del país.
Con un Gastón Giménez encendido y en un intenso partido, el Bodeguero sacó a lucir la propuesta ofensiva de Mariano Larriera en la Copa Argentina y se impuso por 2-1 frente al Taladro, que venía de realizar una exhibición en la Superliga. Ahora, dentro de los ocho mejores, se medirá con el elenco Canalla para seguir alimentando sus aspiraciones de título.
Fue un duelo de fútbol con reglas de básquet. En la tarde del Juan Domingo Perón de Córdoba, el golpe por golpe fue una constante y el trámite fue tan vertiginoso, que no dio respiro. Ambos equipos se mostraron prestos para ir en busca del arco rival y no escatimaron en llegadas de riesgo. El 1-0 llegó tras un rebote a la salida de un córner gracias a Vicotorio Ramis. El Tomba halló la ventaja en el mejor momento de los dirigidos por Julio Falcioni. Esto ayudó a la confianza de los mendocinos, y se adueñaron del dominio del juego.
Pero, sobre el final del primer tiempo, y tras incontables oportunidades para convertir, Darío Cvitanich conectó con un cabezazo letal una triangulación que cayó en el área en forma de un preciso centro de Mauricio Sperdutti. Banfield terminó a pura presión la parte inicial y estuvo cerca de ponerse en ventaja, pero no fue efectivo de cara a la valla defendida por Leonardo Burián.
Las llegadas se sucedieron en el complemento y el ritmo se mantuvo. Con un gran despliegue de sus mediocampistas, Godoy Cruz se volvió a adelantar en el campo y en el marcador. En uno de los goles más lindos del semestre, Giménez firmó el resultado definitivo. El volante sacó provecho de una serie de pases para meterse en el área y resolvió con categoría. Sin recorrido para el remate, el jugador del Tomba se llenó el botín de delicadeza y se la picó por encima de la cabeza a Facundo Altamirano.
Con la victoria, el Bodeguero no sólo se clasificó a los cuartos de Copa Argentina, sino que se embolsó con $1142000. Su próximo desafío será Rosario Central, que pasó de los cuestionamientos a los aplausos al ganarle ayer al actual campeón de fútbol argentino.