09:51
A 30 años de una clase magistral
Más cercano a un set de tenis que a un clásico entre dos potencias, aquella tarde por la cuarta fecha del campeonato, Racing dio una muestra de carácter y buen juego para dar cuenta de un histórico rival, y se sacó una pesada mochila que venía arrastrando desde hace dos años. El drama del descenso había quedado atrás y la reconstrucción comenzó a puro gol y alegría.
Los de Avellaneda sufrieron un duro golpe. En 1983 y tras pelear con los puestos bajos de la tabla, la pérdida de la categoría marcó uno de los momentos más opacos de su brillante historia. No fue hasta 1985 que pudieron retornar a la máxima categoría, pero la etapa posterior no fue sencilla. El sistema de promedios con el que había luchado volvía ser su enemigo y lo acechaba.
Pero el proyecto del Coco Basile, conocedor de la institución, tenía como propósito volver a poner a la Academia en los lugares más encumbrados del fútbol argentinos. Para esto, conformó un plantel de jerarquía con nombres como: Ramón Medina Bello, Ubaldo Fillol, Gustavo Costas, Néstor Fabri, entre otros. En ese torneo, sus dirigidos dieron pelea hasta el final, pero se quedaron en las puertas de la gloria. Culminaron en la tercera posición a 7 puntos de Newell's.
El buen juego y la contundencia caracterizaron al estilo de Racing. La renombrada goleada que dio en la cuarta fecha fue una muestra de cuerpo entero de la impronta de aquel equipo. Walter Fernández y Miguel Colombati abrieron el marcador en el primer tiempo. El 2-0 y el descanso no fue freno para los locales que arremetieron con todo su poderío ofensivo. Las crónicas del duelo marcan que pese a lo abultado del resultado final Hugo Gatti, arquero xeneize, fue una de las figuras.
En el complemento se desató la lluvia de emociones. Ramón Medina Bello, Iglesias, Colombati y Acuña se armaron como héroes para poner las cifras definitivas del encuentro. La humillación fue tan grande para el entrenador del conjunto de la Ribera que tan sólo una jornada después presentó su renuncia a su cargo.
Pero no es un número más. El 6-0 quedó impreso entre las 10 palizas más importantes de la historia académica y la más abultada contra el Xeneize en el profesionalismo. Aunque la revancha para Boca llegó en 1993, cuando derrotó por el mismo resultado al elenco blanquiceleste.
Los de Avellaneda sufrieron un duro golpe. En 1983 y tras pelear con los puestos bajos de la tabla, la pérdida de la categoría marcó uno de los momentos más opacos de su brillante historia. No fue hasta 1985 que pudieron retornar a la máxima categoría, pero la etapa posterior no fue sencilla. El sistema de promedios con el que había luchado volvía ser su enemigo y lo acechaba.
Pero el proyecto del Coco Basile, conocedor de la institución, tenía como propósito volver a poner a la Academia en los lugares más encumbrados del fútbol argentinos. Para esto, conformó un plantel de jerarquía con nombres como: Ramón Medina Bello, Ubaldo Fillol, Gustavo Costas, Néstor Fabri, entre otros. En ese torneo, sus dirigidos dieron pelea hasta el final, pero se quedaron en las puertas de la gloria. Culminaron en la tercera posición a 7 puntos de Newell's.
El buen juego y la contundencia caracterizaron al estilo de Racing. La renombrada goleada que dio en la cuarta fecha fue una muestra de cuerpo entero de la impronta de aquel equipo. Walter Fernández y Miguel Colombati abrieron el marcador en el primer tiempo. El 2-0 y el descanso no fue freno para los locales que arremetieron con todo su poderío ofensivo. Las crónicas del duelo marcan que pese a lo abultado del resultado final Hugo Gatti, arquero xeneize, fue una de las figuras.
En el complemento se desató la lluvia de emociones. Ramón Medina Bello, Iglesias, Colombati y Acuña se armaron como héroes para poner las cifras definitivas del encuentro. La humillación fue tan grande para el entrenador del conjunto de la Ribera que tan sólo una jornada después presentó su renuncia a su cargo.
Pero no es un número más. El 6-0 quedó impreso entre las 10 palizas más importantes de la historia académica y la más abultada contra el Xeneize en el profesionalismo. Aunque la revancha para Boca llegó en 1993, cuando derrotó por el mismo resultado al elenco blanquiceleste.