Con un Messi brillante, autor de dos tantos y asistidor en otro, Barcelona ganó en su debut del Grupo D de la Champions League. Sporting de Lisboa hizo lo propio ante Olympiacos.
Abriendo la fase de grupos Barcelona se impuso por 3-0 ante la Juventus con un Lionel Messi determinante. Doblete y asistencia a Iván Rakitic para la Pulga, que cortó la racha de Gianluigi Buffon de ser un arquero al que nunca había podido convertirle, que quedó con un registro de 315 minutos de imbatibilidad ante el argentino.
Justo cuando se cumple una semana del cruce entre Argentina y Venezuela, donde Messi y compañía no tuvieron un buen desempeño y pasaron la eliminatoria sin marcar goles (contra la Vinotinto fue en contra), la Pulga acaba de convertir su quinto tanto en cuatro días tras el triplete que le propinó al Espanyol por Liga y los dos de hoy.
Y es que en Barcelona a Messi lo entienden, encuentra en Luis Suárez un socio ideal con quien formular jugadas, como la pared hecha sobre el final del primer tiempo que concluyó con un zurdazo característico del 10 que abrió el marcador. Hasta el mismo Ousmane Dembélé, que jugó su primer partido como titular, sabe cómo debe jugar con Messi al lado. Ni hablar si hacemos referencia de Andrés Iniesta. Pero la primera mitad no fue avasallante para los Culés, que manejaron la pelota sin poder lastimar a una defensa turisina que estuvo bien plantada.
La diferencia en el desarrollo iba a llegar en el complemento, aún más cuando a los 10 minutos Messi desbordó por derecha para mandar el centro raso que tras un desvío terminó marcando Rakitic el 2-0. Con la diferencia a su favor el Barsa hizo posesión de pelota, los intentos de la Juventus en los pies de Paulo Dybala y Gonzalo Higuaín se fueron opacando con el correr del encuentro, y para cerrar un partido que renovó las esperanzas en tierras catalanes, fue nuevamente Messi el que puso el 3-0 final con un gol característico de él, con una jugada de derecha al centro y un zurdazo cruzado para batir a Buffon.
De esta manera Barcelona se vengó de su verdugo en la edición pasada que lo eliminó en cuartos de final, para llevarse el primer partido del grupo D, posición que comparte con Sporting de Lisboa, equipo que en su debut le ganó al Olympiacos de Grecia por 3-2.