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domingo 13 de agosto de 2017

La supercopa se queda en la Capital

La Lazio se impuso, en el último minuto, frente a la Juventus por 3-2 para quedarse con la Supercopa de Italia en el estadio Olímpico de Roma. El equipo de la capital de Italia sumó su cuarto trofeo en la competición.

La Lazio, que dominó todo el partido, ganaba 2-0 con un doblete de Ciro Inmobile pero en los últimos 5 minutos apareció Paulo Dybala, por duplicado, para igualar el encuentro. El empate sobre el final parecía obligar a una definición por penales pero en el último minuto apareció Alessandro Murgia para poner el 3-2 definitivo.

El encuentro tuvo a los Celestes dominando en la primera parte sin mucha autoridad pero con la posesión de la pelota. Con el paso de los minutos la Juventus se adelantó en el campo de juego y de contraataque le dio el espacio a Inmobile para quedar cara a cara con GianluiguiBuffon. El delantero intentó esquivar al arquero, que le cometió infracción dentro del área.

Ciro Inmobile fue el encargado de cambiar la infracción por gol y de abrir el marcador con una buena ejecución que fue adivinada por la figura italiana. Con la apertura del marcador a los 32 minutos, el conjunto de Massimiliano Allegri tomó la posesión pero no pudo llevarle peligro al arco defendido por Thomas Strakosha.

Apenas comenzado el segundo tiempo volvió a aparecer una de las figuras de la noche: Ciro Inmobile. El delantero le ganó la espalda a Medhi Benatia y de cabeza amplió la ventaja a favor de la Lazio, que parecía liquidar la final de Italia.

Con la desventaja de dos goles, la Vecchia Signora tomó el protagonismo por primera vez en el encuentro y arrinconó, aún sin ideas, a los campeones de la Copa de Italia. De esta forma acumuló aproximaciones al arco rival. Primero Miralem Pjanic estuvo cerca de tiro libre y luego Gonzalo Higuain no llegó a conectar un centro de Douglas Costa.

Sin ideas y pasando todas las pelotas por el refuerzo estrella, Douglas Costa, mantuvo su hegemonía del balón. A falta de 5 minutos Paulo Dybala contó con un tiro libre, similar al que había errado Pjanic, con el que descontó y dio vida a su equipo. Un golazo de la Joya argentina, que a los 89 igualó el partido con un remate desde el punto de penal.

Con el 2-2 sobre el final parecía que el trofeo se iba a definir por tanda de penales, pero rápidamente apareció el recién ingresado Murgia para, luego de un pase atrás de Jordan Lukaku, poner el 3-2 final. Con esta nueva victoria la Lazio suma su cuarta Supercopa mientras que la Juventus se convierte en el mayor sub-campeón del certamen con 6 finales perdidas.