Las bajas en un plantel, que tenía como máximo objetivo mantener la categoría, hicieron que Humberto Grondona planteara el partido pensando en defender el arco propio por encima de la búsqueda de lastimar el rival. Las acciones comenzaron favoreciendo a los locales, que exigieron a Pablo Santillo en varias oportunidades, pero el ex Racing respondió para mantener con vida al elenco del Viaducto.

No mostraron una buena versión en la primera mitad. El ritmo lento gobernó el deteriorado campo del Ilha do Retiro. Las jugadas de peligro llegaron en el complemento de la mano de las emociones. A los 54 minutos, en una intervención enredada en la que, André puso la rodilla para vencer la última línea de Arsenal. 

El 1-0 generó que el técnico de la visita hiciera cambios ofensivos, y se adelantaron en la cancha. Mereció el empate en varias oportunidades, pero Magrao pisó fuerte y neutralizó los intentos de Franco Fragapane, que ingresó para generar peligro ante la ausencia de un delantero puro.

Pero los embates de los argentinos fueron insuficientes. Los descuidos en el sector defensivo, provocados por la urgencia del resultado, aparecieron y Sport Recife no perdonó. Cuando los brasileños no estaban cómodos con el trámite del encuentro, surgió la figura en el área de André, que mandó con la cabeza al fondo de la red un envío desde el sector izquierdo.

Sobre el final, los de Sarandí complicaron seriamente a los dirigidos por Vanderlei Luxemburgo, que no pudo estar en la cancha porque aún cumple una sanción. Pidiendo la hora y acorralado contra su valla, los locales demostraron debilidades, que mantiene cierta esperanza para la remontada argentina.

El marcador no se pudo modificar, y Arsenal se llevó una dura derrota de Recife. Deberá revertir una amplia diferencia para poder seguir en la competencia continental. El partido de vuelta será el 27 de julio en el estadio del Viaducto.