Tal y como dice la canción "Todo tiene un final, todo termina", eso es inevitable pero llegado el caso, que mejor que el final sea una fiesta. Justamente esto fue lo que ocurrió hoy en el partido despedida de Leandro Romagnoli en el club de sus amores, San Lorenzo.

El Pipi debutó el 13 de diciembre de 1998 con tan solo 17 años, cuando el Cuervo estaba bajo la conducción de Oscar Ruggeri, a partir de allí tuvo una carrera llena de exitos, especialmente en su amado Ciclón en donde conquistó seis títulos (Clausura 2001, Copa Mercosur 2001, Copa Sudamericana 2002, Torneo Inicial 2013, Copa Libertadores 2014 y Supercopa 2016) para convertirse en el máximo ganador de la historia del club igualando a José Fossa, otra vieja gloria del club de Boedo.

El homenaje comenzó a las 14 cuando los hinchas de San Lorenzo comenzaron a ingresar al estadio en donde a las 17 comenzó el partido que enfrentaba a los campeones del Clausura 2001 y a los amigos del Pipi frente a los campeones de la Libertadores 2014. En medio de ello hubo varios shows musicales y más de una sorpresa, tanto para la gente como para el mismo homenajeado.

El equipo de los Campeones del Clausura 2001 estuvo conformado por: Sebastián Saja, Juan José Serrizuela, Eduardo Tuzzio, Aldo Paredes, Raúl Estévez, Pablo Michelini, Néstor Raúl Gorosito, Leandro Romagnoli (2), Ezequiel Lavezzi, Beto Acosta (1) y Bernardo Romeo (2). Mientras que en el banco acompañaban a la dupla técnica conformada por Ruggeri y Rubén Darío Insua: Gustavo Campagnuolo, Ramírez, Román Díaz, Adrián González, Jorge Quinteros, Diego Capria, José Chatruc (1), Rodrigo Astudillo, Germán Rivarola, Alvarez, Daniel Fagiani, Celso Esquivel, Luis Medero, Félix Benito, Leonardo Di Lorenzo, Leonardo Rodríguez, Martín Saric, Guillermo Franco, Florian, Iván de Pineda y Gastón Soffriti (1).

Mientras que por el lado de los Campeones de la Libertadores se presentaron: Sebastián Torrico, Gonzalo Prósperi, Mauro Cetto, Walter Kannemann, Germán Voboril, Enzo Kalinski (1), Juan Mercier, Néstor Ortigoza, Ignacio Piatti (2), Héctor Villalba y Gonzalo Bergessio (2). En el banco de Edgardo Bauza se encontraban: Nico Blandi, Mauro Matos, Pablo Alvarado, Gonzalo Rodríguez y Fabricio Coloccini. Además en el segundo tiempo se sumo el mismisimo Pipi

El partido fue parejo y emotivo, con grandes jugadas de las leyendas del Cuervo que estuvieron presente, desahogos de algunos de los amigos del Pipi que se daban el lujo de sentir lo que era jugar con la camiseta del Ciclón, recuerdos como la definición de penal de Ortigoza en la final de la Libertadores 2014 y muchas emociones, como lo fue el ingreso de Atilio Romagnoli, el papa del Pipi, para luego de un emotivo abrazo jugar junto a su hijo e incluso acabar con un gran gol.

El fútbol despide a otro gran jugador, San Lorenzo a su máxima figura, quizas por eso muchos de sus hinchas lloran, pero tanto ellos como todos los amantes del buen fútbol solo podrán decir "Gracias y hasta pronto".