Otra sorpresa se dio en la Copa Argentina. Gimnasia y Esgrima de Mendoza venció por penales a Quilmes y avanzó a 16avos de final de la Copa Argentina. La cancha de Temperley fue el escenario donde el Lobo Mendocino terminó festejando un triunfo inesperado.
El director técnico del Cervecero decidió priorizar el campeonato local por encima de esta fase de la copa. Es así que Cristian Díaz paró un equipo alternativo y se dio un encuentro muy disputado pero con poca claridad en los ataques de ambos bandos. Gimnasia,, que lidera su zona del Torneo Federal A, tuvo como objetivo cerrarse bien atrás y buscar sólo de contra.
Los 90 minutos transcurrieron con pocas llegadas de peligro, aunque en el segundo tiempo los mendocinos tuvieron un gol anulado que fue de lo más saliente del partido. Cuando Alfredo Beranger marcó el final del tiempo reglamentario, todo se preparó para una nueva definición por penales en este certamen.
Tras la conversión de Jorge Curbelo, el Cervecero empezó mal ya que Diego Colotto le pegó al travesaño. La ventaja se mantuvo con los tantos de Patricio Cucchi y Ezequiel Riera para los mendocinos y de Maximiliano González para Quilmes, pero todo se encaminó cuando Tomás Marchiori le tapó la definición a Francisco Celeste.
El cuarto y definitivo penal lo marcó Pablo Palacios Alvarenga. Gimnasia y Esgrima de Mendoza está en los 16avos de final de la Copa Argentina, donde será rival del ganador entre Talleres de Córdoba y Defensores de Belgrano. Para Quilmes, deberá centrarse en su lucha por no descender en el campeonato de Primera.