San Lorenzo tuvo su estreno en la Copa Libertadores 2017 perdiendo 4-0 en condición de visitante ante el Flamenco de Brasil. Si bien el primer tiempo hubo una paridad, en el complemento llegaron los goles de Diego, Miguel Trauco, Romulo y Gabriel; Torrico atajó un penal para evitar que la derrota fuera mayor.
En la reapertura del estadio Maracaná, el Cuervo visitó al equipo de Brasil por el segundo partido del Grupo 4. En el comienzo del encuentro los locales tomaron el protagonismo, pero se encontraron con un equipo visitante ordenado en todas sus líneas.
A los 29 minutos de la primera parte una de las figuras del equipo local, Federico Mancuello, debió dejar la cancha por un golpe en la cabeza que trajo preocupación para su entrenador Ze Ricardo.
A pocos minutos de comenzar el complemento Marcos Angeleri le cometió una falta a Everton cerca de la medialuna, para que luego sea Diego el encargado de ejecutar el tiro libre hacia el arco de Cristian Torrico. El remate fue bien colocado y abrió el marcador.
Con la ventaja a su favor los locales continuaron atacando, y ampliaron la diferencia en el marcador a los 16 minutos de la segunda parte cuando Trauco remató de gran forma desde media distancia y nuevamente derribó la resistencia de Torrico.
Ante el resultado negativo en el marcador los dirigidos por Diego Aguirre intentaron hacer pie en la mitad de la cancha teniendo la posesión del balón, pero esto le duró poco ya que el Rojo y negro volvió a convertir a los 70 minutos. Esta vez fue Romulo el autor del gol, quien aprovechó que Fernando Belluschi no pudo rechazar la pelota luego de un corner y la empujo sobre el segundo palo.
Con un 3-0, y un equipo visitante ya vapuleado anímicamente, los brasileros continuaron atacando a la espera de ampliar aún más la goleada. Paolo Díaz le cometió falta dentro del área a Gabriel, pero Torrico le ganó el mano a mano desde los 12 pasos a Paolo Guerrero y así mantuvo la diferencia en el resultado.
En los minutos finales se notó el desgano de los jugadores argentinos quienes sufrieron un cuarto gol, esta vez desde los pies de Gabriel que ejecutó un lindo remate hacia el ángulo izquierdo del arquero visitante.
Con esta derrota el equipo de Buenos Aires comenzó de la manera menos esperada la nueva edición de la Copa Libertadores. Quedó en la última posición al menos hasta la semana que viene cuando enfrente en el Nuevo Gasómetro a Paranaense de Brasil.