La primera parte fue una muestra clara del cambio de actitud de los rosarinos en comparación de lo que fue el partido de ida, y casi del resto del año. La ambición y la determinación para ir en contra del arco del elenco brasileño fueron las armas empuñadas por los dirigidos por Omar De Felippe a la hora de plantear el golpe por golpe. Con Héctor Fértoli como eje, la Lepra dominó el trámite y generó las situaciones más riesgosas.
Pese al esfuerzo y a las reiteradas atajadas de Santos, Newell's tuvo que esperar hasta los 36 minutos para conseguir la apertura del marcador. Lo merecía y con justicia, Leal le dio el 1-0 al conjunto argentino, que se acercó en el global y sólo necesitaba dos más para forzar los penales. Desde la ventaja, hasta el entretiempo, fue un monólogo del anfitrión, pero la falta de fortuna a la hora de la definición le costó caro.
En el complemento, volvió a aparecer el delantero portugués para poner el 2-0. Con un cabezazo implacable, el punta sacó a lucir toda tu potencia para achicar ventajas. A los 20 de la segunda mitad, con bastante tiempo por recorrer, los rosarinos se pusieron a tiro de igualar la serie. El público en las tribunas, siempre reconociendo el esfuerzo, empujó a los jugadores. Cerca del tripelete, el atacante se perdió la clasificación, pero no se resignó. Con todas las líneas adelantadas, los brasileños hallaron espacios para golpear de contra y descontaron para la tranquilidad del entrenador Fernando Diniz.
Nikao agarró mal parada a la defensa leprosa y puso el 2-1 final a falta de cinco minutos para el cierre. Sin tiempo y con la obligación de marcar tres tantos más para asegurarse su pasaje para la siguiente ronda del certamen continental, los argentinos se derrumbaron frente a la eliminación. Un aplauso cerrado despidió a los protagonistas, que luego explicaron que la llave se perdió en Brasil. El mal desempeño les costó caro y la diferencia se les hizo cuesta arriba.
De esta forma, el equipo de Curitiba avanzó a la segunda ronda de la Sudamericana, en la que deberá esperar por los clubes que se sumen a la competencia proveniente de la Libertadores. Después del Mundial se reanudará la acción en un torneo que cada vez se torna más complicado y que todos los participantes están ávidos por ganar.