San Lorenzo derrotó al Funebrero en el cierre de la jornada de sábado de la vigesimocuarta fecha del torneo local y no se baja de la lucha. Quedó a cuatro puntos de Boca, que mañana deberá cumplir con Newell's.
Desde el comienzo, el local tomó las riendas del juego y arrinconó a su rival contra su arco. De la mano de Rubén Botta, el Ciclón pudo sacar a lucir un gran volumen en el medio campo. Las reiteradas combinaciones en ofensivas provocaron que los delanteros del conjunto del Pampa Biaggio enfrentaran con frecuencia a la figura de Pedro Fernández bajo los tres palos.
Tras dos chances desperdiciadas por Gabriel Gudiño, que no pudo aprovechar las fragilidades en el fondo que le ofreció Chacarita, fue Nicolás Reniero el autor de la apertura del marcador. Con una definición a puro temple, el volante sacó ventaja de un fallo de cálculo de Germán Ré y con un suave cabezazo le metió un sombrero al defensor para hacer explotar a los presentes.
Con el control de las acciones, el Ciclón aceleró para aumentar la ventaja, pero la efectividad le jugó una mala pasada a la hora de resolver en los últimos metros. Ya en el complemento, la visita insinuó más de lo que pudo concretar, aunque se las ingenió para incomodar a Nicolás Navarro. Mauro Matos soportó los avances del Funebrero, que además tuvo en Federico Vismara el toque para intentar romper desde lejos.
De esta forma, San Lorenzo alcanzó los 46 puntos en la Superliga y no se baja de la pelea por el título, ya que quedó a cuatro de Boca. Además es casi es un hecho su clasificación la próxima Libertadores. Le sacó seis unidades a Huracán, que tiene un partido menos, y sólo quedan nueve por disputar. Por su lado, lo que le queda al conjunto de Sebastián Pena, ya descendido, es afrontar sus últimos compromisos en la Primera División. En la fecha 25, se medirá contra Temperley, mientras que el Matador visitará a Patronato.
Homenaje al nueve bravo
Antes del inicio del encuentro, la dirigencia del Ciclón, con Matías Lammens a la cabeza, se rindió ante el delantero y le entregó una placa conmemorativa para agasajar el paso de Matos por el club de Boedo. Fue parte del plantel durante cuatro temporadas y tuvo su pico máximo de la mano de Edgardo Bauza en el 2014, año en la que conquistó la Copa Libertadores. Los hinchas en el Nuevo Gasómetro recordaron sus goles y le rindieron una calurosa ovación. Con la camiseta del equipo azulgrana, el punta se dio el gusto de darle una de las emociones más importantes de la historia del club, al marcar en la agónica victoria contra Auckland City en la semifinal del Mundial de Clubes. Su tanto le dio la chance de medirse contra el Real Madrid de Cristiano Ronaldo en el duelo decisivo. Merecidos los aplausos.