Desde el arranque del partido, la Academia salió con todas sus armas contra la valla visitante, pero las buenas reacciones del arquero Martín Silva sostuvieron la igualdad. Primero fue el defensor Alejandro Donati quien tuvo la apertura del marcador. A los seis minutos, el ex Central remató, pero se encontró con la agigantada figura del arquero uruguayo. Casi segundos después Martínez no pudo festejar ya que su disparo esquinado se topó con los guantes del as del elenco carioca.
A los 10 de la parte inicial, Lisandro López se hizo cargo de un penal, pero el histórico delantero de Racing no pudo vencer a Silva, que para esa altura del duelo ya se candidateaba como de lo más destacado de la noche. La intensidad de los de Avellaneda no flaqueó frente a las reiteradas opciones desperdiciadas. A la media hora de juego, Centurión tomó la lanza y se hizo cargo de desnivelar la balanza. El extremo a pura creatividad puso el esperado 1-0 y estiró su buen momento en las redes ajenas después de lo que fue su dobelete frente a Belgrano en la Superliga.
Apenas unos instantes después, los de Coudet capitalizaron el envión de la ventaja y señalaron el 2-0. Su estrella, Lautaro Martínez, aprovechó un centro que sólo tuvo que empujarla debajo del arco. Con una estirada, el juvenil, que pide pista en la selección de Jorge Sampaoli, alcanzó los cuatro gritos en la competencia internacional y se ubicó segundo en la tabla de artilleros.
Sobre el final de la primera parte, otro penal hizo que los hinchas del local pidiera por el referente de la delantera albiceleste. El Licha recogió el guante y se volvió a medir contra Silva desde los doce pasos. Con otra brillante tapada, el arquero se lució para evitar la conquista del nueve, que recibió en su caminata al vestuario todo el apoyo de los presentes en el Cilindro.
Ya en el complemento, Vasco mostró todas las flaquezas en el fondo y sufrió el hambre de Racing. Para ponerle el broche de oro a una actuación a puro despliegue, Matías Zaracho convirtió a pura gambeta el tercero. El volante participó activamente en los avances de los anfitriones y tuvo su premio al definir con el arco a su merced tras eludir al as de los brasileños.
Los números de goleada derrumbaron el planteo de la visita y potenció aún más a Racing que todavía tenía más. Esta vez fue la vencida para Lisando López. Otro penal desnudó las debilidades de la defensa carioca y le dio la revancha final al punta. Se hizo cargo y no falló. El instinto lo llevó a pedir disculpas en vez de celebrarlo con énfasis.
El 4-0 cerró el trámite y el equipo argentino se dedicó a administrar las cargas. De esta forma, Racing empieza a pensar en los octavos de la copa. Si bien recién cumplió con la mitad de los compromisos del grupo, los 7 puntos, producto de dos victorias y un empate, lo dejaron como líder de la tabla. A la espera del duelo entre Cruzeiro y la Universidad de Chile, los de Avellaneda estiraron su diferencia de gol positiva a seis, casi una sentencia de clasificación. En la próxima fecha, volverá a medirse frente al Vasco da Gama, que sólo sumó una unidad, en suelo brasileño.