La Roma dio el golpe en el Olímpico ganándole al Barcelona por 3-0 y eliminándolo de la Champions tras levantar el 1-4 sufrido en la ida. Con goles de Edin Džeko, Danielle De Rossi -de penal- y Kostas Manolas se metió entre los cuatro mejores de la Champions League avanzando a semifinal.

Histórica la remontada que tuvo el conjunto italiano, que antes de empezar la serie era el menos favorito de todas las llaves y el equipo que todos querían enfrentar, pero demostró que nunca se lo puede dar por muerto y le jugó de igual a igual, e incluso fue superior, a un gigante como Barcelona. Ya a los seis minutos comenzaba a mostrar las falencias defensivas de los catalanes, y cómo las aprovechaba, con un pelotazo largo para Džeko entre Jordi Alba y Samuel Umtiti que el delantero bosnio terminó cambiando por gol. Era el primer aviso que el elenco capitalino le daba a un Barsa totalmente desconocido.

El planteo de Ernesto Valverde, con Sergi Roberto como extremo por la derecha, y Luis Suárez junto a Lionel Messi muy solitarios arriba y alejados del mediocampo, hizo que el fútbol del Barcelona fuera una mera sombra del que nos tiene acostumbrado. La Roma continuaba yendo por la remontada, pero le faltaba precisión en el último pase, hasta que una pelota llegó a los pies de Džeko dentro del área y fue bajado por Gerard Piqué con falta para que los italianos contaran con un penal que le facilitara las cosas. El encargado de ejecutarlo fue el capitán De Rossi, el mismo que había marcado en propia puerta en el partido de ida, quien superó a Marc Ter-Stegen y a los 58 minutos de partido ponía el 2-0 que los dejaba a tiro del milagro.

El segundo tanto cayó como un balde de agua fría en el Barcelona, que mandó a la cancha a André Gómez con intención de contener el mediocampo y frenar la embestida rival, pero le dio poco efecto el cambio a Valverde. La Roma continuó yendo una y otra vez hasta lograr el tanto que le daba el empate global y clasificación por el tanto de visitante. Un córner desde la derecha ubicó un excelente anticipo en el primer palo de Manolas ante Semedo y con un cabezazo descolocó a Ter-Stegen para desatar la euforia en todo el Olímpico a falta de ocho minutos para culminar. Con el resultado adverso el Barsa puso en cancha a Ousmane Dembelé y Paco Alcácer para intentar la heroica en los últimos minutos, pero todo intento fue innecesario y terminó quedando afuera de la Champions nuevamente en cuartos de final como el año pasado cuando cayó en manos de la Juventus.