Por la fecha 21 de la Superliga, Racing dejó puntos en el camino y cedió terreno en la cima de la tabla. Luego de una semana conflictiva, en la que lo tuvo involucrado en un incidente de tránsito, el volante volvió a las primera planas por lo bueno y lo malo. El ex Boca había iniciado el sendero de la remontada, pero la roja sobre el final opacó una actuación destacada.

Desde el comienzo, la Academia evidenció síntomas de molestia con respecto al planteo propuesto por el elenco dirigido por Pablo Lavallén. Con reiterados cortes en el medio, y con las bandas como principal vía de ataque, Belgrano se adentró en campo rival y llevó peligro hacia el arco contrario. La conexión de los delanteros del Pirata fue una complicación constante para los zagueros del conjunto visitante, que tuvo que apelar a la participación de Juan Musso para estar cerca en el trámite del juego.

Luego de exigir la tarea del joven arquero de Racing, el local consiguió romper con la igualdad. En el mejor momento de los cordobeses, Leonardo Sequeira se escapó por el sector izquierdo, y en una jugada individual provocó el desconcierto defensivo que culminó con Musso metiendo la pelota contra su voluntad en su valla. Entre el palo y un rebote en su espalda, el remate del delantero se le terminó colando al juvenil.

Pero ni siquiera las reprobaciones del Chacho Coudet habían llegado a los oídos de sus jugadores que ya nuevamente estaban en partido: a los 29, dos minutos más tarde del tanto de los locales, Ricardo Centurión dijo presente para poner el 1-1. El ex Boca aprovechó la pasividad de la defensa de Belgrano y en dos tiempos venció la intención de Lucas Acosta, que poco pudo hacer frente a su definición de zurda. La paridad en el marcador le restó intensidad al duelo, y los hinchas anfitriones no ocultaron su fastidio ante la falta de ritmo de su equipo.

El complemento no quiso ser menos en materia de emociones, y rápidamente ofreció las alternativas prometidas en la primera parte. Leonardo Sigali, a los 3 minutos de la reanudación puso un cabezazo bombeado que sorprendió a propios y ajenos para ponerle una sonrisa a Coudet. El defensor, con todo el oficio, se deshizo de su marca y definió con soltura ante la duda del arquero del Celeste. El 2-1 tranquilizó a la visita y se amigó con el balón. Neri Cardozo, que poco pudo gravitar en la etapa inicial, se adueñó de la creación. Por el contrario, Lautaro Martínez no terminó de imprimirle su jerarquía a los ataques académico. Cuando se relamía para poner el 3-1, pero no pudo imponerse a la salida de Acosta.

De a un escalón por vez, Belgrano fue remontando el duelo y puso nuevas tablas. El 2-2 llegó apenas pasada la hora de juego gracias a una exquisita resolución de tiro libre de Marcelo Benítez. El volante la colgó en el ángulo, y la volada inerte de Musso hizo aún más espectacular el gol. Esto catapultó a los anfitriones a ir en busca de la victoria, pero una discreta actuación de Musso, que respondió con atajadas sólidas los diversos embates de Matías Suárez y compañía. Sobre la hora, Centurión echó por tierra lo bueno que hizo, y se fue expulsado por protestarle una amonestación a Delfino. Dará que hablar...

De esta forma, la Academia llegó a los 36 puntos en la tabla de la Superliga. A 11 del líder, que deberá cumplir su compromiso de esta fecha contra Talleres, la tarea de pelear el título empieza a ser algo cuesta arriba. Si bien en la próxima jornada se medirá en el Cilindro contra River, los cañones apuntan al ámbito continental. Universidad de Chile será el rival el martes 3 de marzo. En cambio, el Pirata tiene una misión distinta, aunque el empate tampoco le suma de mucho. Con varios contendientes, la lucha por el ingreso a las copas lo tiene con 31 unidades. A encuentros del final, los cordobeses se mantienen en zona de Sudamericana. En el capítulo 22, se cruzará con Central.