Sin jugar bien, y con un Marcos Díaz de brillante actuación, Huracán derrotó a Temperley por 2-1 y se llevó un triunfo que vale oro del sur bonaerense para meterse en zona de Libertadores y hundir aún más al Gasolero, que suma 8 sin conocer la victoria. Andrés Chávez e Ignacio Pussetto abrieron el marcador mientras que Franco Sosa descontó sobre el final.

La importancia de tener un buen arquero que te gane partidos se ve en ocasiones como estas. Temperley hizo todo para quedarse con los tres puntos, jugó mejor que el Globo a lo largo de los 90 minutos y hasta pudo haber goleado. Lo tuvo Emiliano Ozuna en dos oportunidades, lo mismo para Santiago Giordana, que entre Díaz y el poste le ahogaron el grito en una doble oportunidad. Huracán la pasaba mal en el campo de juego, antes y después de abrir el marcador a los 17 minutos con Chávez, que captó un desvío para quedar solo frente a Josué Ayala.

El complemento comenzó como había terminado la primera mitad, con Temperley atacando y llegando con claridad ante Marcos Díaz, que seguía luciéndose para darle vida a su equipo, que recién pudo encontrar tranquilidad a los 12 del segundo tiempo cuando Pussetto estampó el 2-0 que cayó como un balde de agua fría a los jugadores del Gasolero, que volvieron a meterse en el partido recién a falta de 10 minutos con el descuento de Sosa y nuevamente se encontraron con el 1 de Huracán, que le dio una victoria más que importante a su equipo para meterse en zona de clasificación a la Copa Libertadores y hundir aún más a Temperley, que llegó a 8 sin conocer el triunfo.