River Plate se impuso por 2-0 ante Boca Juniors con goles de Gonzalo Martínez, de penal, y de Ignacio Scocco para quedarse con un nuevo titulo nacional en el Malvinas Argentinas. El encuentro se presentó como un show, con juegos de luces, artistas en escena y gran cantidad de fuegos artificiales, algo que no es común en América.

Ambos llegaban con dos finales de Supercopa perdidas, para uno de los dos la tercera iba a ser la vencida. Boca, que venía con un mejor nivel futbolístico, empezó mejor y pudo mostrar un dominio en los primeros del encuentro gracias al manejo de la pelota de Edwin Cardona y Pablo Pérez.

Por su parte, Marcelo Gallardo buscó un cambio de esquema y apostó a los jugadores que venían con trayectoria en el club (con las excepciones de Lucas Pratto y Franco Armani). Puso por primera vez al Pity Martínez de enganche para tapar e impedir que Wilmar Barrios pueda ser el motor del rival. De esta forma y poco a poco se acercó al arco rival.

En el primer acercamiento con peligro del Millonario, el número 10 dibujó una pared con Ignacio Fernández quién recibió una clara falta de Cardona que el arbitro no dudó en cobrar. Martínez fue el encargado de hacerse cargo de ejecutar el tiro desde los doce pasos y abrir el marcador.

Con la ventaja el equipo de Núñez se posicionó mejor en el campo de juego y pudo equilibrar el juego con su rival, que chocó continuamente con Leonardo Ponzio. En la mitad de la cancha el juego se hizo áspero, lo que provocó que el encuentro esté continuamente parado por faltas innecesarias de ambas parcialidades.

En el complemento el Xeneize mejoró notablemente. A través de Pérez y Cardona volvió a generar fútbol y logró arrinconar a un equipo que fue superado por presión y juego. Es por ello que durante el primer cuarto de hora los de Guillermo Barros Schellotto contaron con varias posibilidades de gol pero Franco Armani supo vestirse de héroe y evitar la caída de su arco con tres geniales atajadas.

Boca continuaba en busca del empate pero River supo aprovechar un contraataque comandado por Ignacio Fernández, quién habilitó a Martínez para que el 10 invente un buscapié que Scocco supo encontrar para estampar el 2-0 final. Fue el primer gol del ex Newell's frente a Boca Juniors.

Tras la ventaja de dos goles para el Millonario, el partido quedó prácticamente definido y perdió intensidad de juego aunque los de La Boca pudieron descontar en alguna jugada aislada en el final del partido. Con la victoria consumida, Marcelo Gallardo logró vencer por tercera vez consecutiva al equipo boquense de un duelo de eliminación directa. Ya lo había hecho en la Sudamericana 2014 y en la Libertadores 2015.