Independiente tuvo un debut para el olvido en la Libertadores cayendo ante Deportivo Lara. El campo de juego, peor que muchos del Federal A, jugó un rol importante aunque no fue el motivo del flojo partido de los de Holan.
Independiente volvió a la Copa Libertadores, la misma que lo tiene como máximo ganador, tras siete años y no le fue de la mejor manera. Jugó mal ante Deportivo Lara en Venezuela y perdió por 1-0 con gol de Carlos Sierra. Flojo debut de los de Ariel Holan.
En un campo de juego espantoso, que le llevaba dos tiempos poder controlar la pelota a los jugadores, el Rojo no pudo hacer pie y se trajo una dura derrota. Mal en el retroceso, siempre un tiempo más tarde que sus rivales y con problemas para solucionar el pelotazo cruzado a espaldas de los laterales, Independiente nunca supo plantarse en el campo y le brindó facilidades a los de Lara, que lo aprovecharon a los 10 minutos del partido para poner el 1-0 con un centro que cruzó toda el área y definió el colombiano Sierra por la izquierda.
Los de Holan, aún con las dificultades del terreno, trataron de proponer el juego corto por abajo y arrimarse al arco rival. Un envío aéreo de Juan Sánchez Miño encontró la cabeza de Fernando Gaibor en una situación inmejorable que el ecuatoriano la tiró por encima del travesaño solo en el área chica. Una trepada del mismo Gaibor por derecha ubicó a Martín Benítez en la medialuna, que remató forzando al arquero de Lara con una buena atajada abajo. Sin demasiado juego Independiente arrimaba peligro ante un rival que esperaba agazapado la contra.
El encuentro se fue consumiendo de a poco y la ecuación no cambiaba. Holan buscó la solución metiendo mano con los cambios de Juan Manuel Martínez y Leandro Fernández pero poco aportaron sus ingresos, y por si fuera poco sobre el final Alan Franco se equivocó en el fondo y le regaló un contragolpe al rival de dos contra uno que terminó con la pelota en el travesaño salvándose con los justo.
No fue el mejor debut para Independiente que tras siete años volvió al certamen más importante del continente y con el que sueña conseguir su octava copa tras una larga sequía de 34 años. Quedó último en su grupo -Millonarios y Corinthians empataron en 0- y deberá mejorar varios puntos para cuando reciba a los colombianos el 15 de marzo.