En el juego postergado de la fecha 10, Godoy Cruz vapuleó por 4-1 a Lanús, estiró su invicto como local en la Superliga, y se arrima a la clasificación para la Copa Libertadores 2019.
Una goleada que dejó en claro la diferencia de los momentos. Con toda la contundencia en el área rival, el conjunto de Diego Dabove dio cuenta con facilidad del Granate, y se afirmó en la zona de clasificación a las competiciones internacionales. Por su parte, el elenco del sur bonaerense no levanta cabeza en el campeonato local. Desde octubre que saca tres puntos en el certamen doméstico.
Diego Viera, el Morro Santiago García, por duplicado y Juan Garro se anotaron en la red. Una clase de táctica y profundidad dio por tierra con las esperanzas de Lanús de romper con la racha mendocina. En la temporada, Godoy Cruz no sabe lo que es perder en el Malvinas Argentinas. Ahora el desafía para el Expreso Bodegurero será encaminar su rumbo fuera de casa.
Desde el inicio del primer tiempo, Guillermo Fernández se hizo dueño de la pelota, y permitió crecer el juego de los locales. Por las bandas y con una presión alta la línea de volantes tuvo una tarea casi perfecta. En cambio, el Granate falló en las individualidades y sufrió la falta de profundidad. Lautaro Acosta no pudo darle vuelo a los dirigidos por Ezequiel Carboni.
Las emociones cayeron en el complemento y no dieron respiro. Primero fue Viera, a la salida de un córner. Más tarde García salió a marcar a la zaga de la visita y enfrentó con éxito a Esteban Andrada. El 3-0 fue de penal. Garro, quien sufrió la pérdida de un familiar en la previa del partido no dudó en convertirlo en gol y amplió la ventaja. Sin freno, y con la ilusión de una remontada, Fernando Barrientos achicó distancias a falta de un minuto para el final, pero nuevamente el delantero de los mendocinos se anotó en el marcador y puso las cifras definitivas.
La próxima fecha Godoy Cruz volverá a poner en juego su racha frente a Belgrano. La tabla le empieza a sonreír, y va de la mano de lo que se ve en la cancha. Con 24 unidades, se ubica séptimo en la general y está a una de alcanzar a Independiente, que hasta ahora es el último que se está metiendo en la Libertadores 2019.
Por su parte, las cabezas bajas de los jugadores de Lanús al partir hacia el vestuario es una explicación del momento duro. Desde la sexta jornada que no consigue un triunfo. Se ubica 22º en la Superliga, y, como si fuera poco, tiene dos partidos complicados en el horizonte. River como local y Racing en Avellaneda. El golpe de la era posta Almirón todavía se siente.