En el sur del Gran Buenos Aires aparecieron los goleadores para sentenciar un empate que pudo ser victoria para cualquiera de los dos. Fernando Zampedri logró abrir el marcador en el inicio, pero en el complemento Emanuel Gigliotti puso el empate final. El rojo continúa lejos de Boca Juniors, mientras que el Canalla no se acerca a la zona de clasificación a la copas.

En el primer partido por Supeliga argentina del año, el Rojo fue más que Central pero no pudo llevarlo al marcador. En el inicio los dirigidos por Ariel Holan fueron en busca de la apertura del marcador que la ineficacia de Nicolás Domingo y Juan Sanchéz Miño no dejó efectivizarla.

Luego de que los jugadores locales pifiaran sus oportunidades, se cumplió una vieja ley del futbol: “lo que no se hace en un arco, se hace en el otro”. Fue así entonces que desde un centro de pelota parada, Zampedri ganó de cabeza y abrió el marcador para el equipo visitante.

Con la desventaja en el marcador, el último campeón de la Copa Sudamericana fue en busca de una rápida igualdad pero sin grandes ideas chocó ante una defensa sólida. En el complemento el local mejoró en rendimiento y rápidamente logró el empate tras una jugada colectiva. Se juntaron Facbricio Bustos y Leandro Fernández para desequilibrar y asistir a Gigliotti que remató de primera. La pelota dio en el palo y, tras un desvío en el arquero Jeremías Herrera, se convirtió en el 1-1.

Los dirigidos de Holan igualaron en el marcador y superaron ampliamente en juego durante el complemento, fue así que acumularon varias ocasiones de gol que no pudieron convertir. Un remate de Martín Benítez en el palo, otro de Fernández y luego un disparo por encima del travesaño de Gigliotti fueron las más claras para el Rojo.

Independiente mejoró y pudo ganarlo aunque también perderlo cuando Rosario Central aprovechaba espacios libres en alguna replica. Pero ninguno de los dos tuvo la efectividad suficiente para llevarse los tres puntos, de esta forma dividieron unidades y ambos quedaron desconformes.