Unión de Santa Fe le ganó en el Amalfitani a Vélez Sarfield por 2-0 con un gol de cada uno de sus goleadores: Franco Soldano y Lucas Gamba. De esta forma, el equipo que se había preparado para pelear el descenso se ubica en el segundo puesto mientras que el Fortín cae entre los últimos puestos de la tabla de promiedos.

Habría que revisar las estadísticas y hacer una viaje en el tiempo para encontrar un arranque tan positivo del equipo de Santa Fe en un torneo de Primera División. Porque con una idea de juego clara y gracias al gran peso de ataque que le brindan sus delanteros, el Tatengue es protagonista en todas las canchas que visita.

Esta tarde en Liniers no fue la excepción. Dominó a un Vélez desconocido, lo atacó por todos los sectores y hasta se quedó corto con la cantidad de goles convertidos. A los 27 minutos pudo abrir el marcador tras una fantástica definición por arriba del arquero de Franco Soldano. Rápidamente llevó la superioridad del terreno de juego al resultado.

Antes de gol, Braian Cufré había cometido una falta por una mano dentro del área que Federico Beligoy no sancionó. Ya merecía estar por encima en el marcador. Luego del gol, los dirigidos por Leonardo Madelón jugaron con los nervios de su rival y manejaron los tiempos del encuentro.

En el complemento el conjunto visitante salió decidido a sentenciar la victoria. Antes del cuarto de hora fue Lucas Gamba quién intentó, en una gran jugada personal, abrir el marcador pero el palo le negó el grito. Por suerte, para los santafecinos, minutos más tarde el delantero iba a poder desviar un disparo de Mauro Pittón para poner el 2-0.

Tras la ventaja de dos goles el partido comenzó a entrar en una meseta poco a poco. Unión de Santa Fe bajó el ritmo y se aseguró tres puntos importantes que lo dejan en la segunda posición con 17 puntos en la superliga. Vélez Sarfield, por su parte, quedó solamente a 8 puntos del descenso directo.