Perdió 3-1 como visitante en el encuentro de vuelta por las semifinales de la UEFA Europa League. Pero con la ventaja cosechada en la ida, logró los méritos para disputar la cita decisiva en Estocolmo. El acumulado se cerró en un ajustado 5-4.

La urgencia por descontar en el marcador global hizo que el Lyon tome la iniciativa en el arranque del partido. Ataques vertiginosos y carentes de orden, aunque ávidos de red caracterizaron a la carta de presentación del local. Pero los fallos de cara al arco rival y los aciertos defensivos de los holandeses provocaron que la desesperación se profundizara. De a poco, fueron los dirigidos por Peter Bosz quienes encontraron facilidades para aumentar la diferencia.

De esta forma, Kasper Dolberg puso el 0-1.A Los 26 minutos enfrentó a Anthony Lopes y, con una suave resolución, enmudeció a los fanáticos en el estadio. La serie adquirió un panorama de asunto finalizado. Ajax mantuvo el protagonismo de las acciones, mientras que los franceses apelaron a cortar las combinaciones con falta.

Ajeno al trámite que se estableció, el partido sufrió en el final de la primera parte un emotivo vuelco. Dos jugadas le alcanzaron a Alexandre Lacazette para revivir las esperanzas de la remontada. A los 44, de penal y a los 46, al capitalizar un buscapié provocado por un rechazo deficiente, el delantero aumentó la expectativa para el complemento.

Con el envión antes del descanso, Lyon cambió su disposición ofensiva en el segundo tiempo, aunque la desesperación fue un factor común que lo nubló en los últimos metros de la cancha. Erráticas resoluciones le impidió arrimarse a los dos goles necesarios para llevar la llave al alargue.

Pese a la eliminación, el esfuerzo tuvo su premio. Rachid Ghezzal, con un cabezazo de pique al suelo, amplió el resultado parcial. Sumado a esto, la expulsión en Ajax de Nick Viergever puso un tomo dramático al final del encuentro. Con más arrojo que ideas y con el aliento del público, el local estuvo cerca de la hazaña. Varias situaciones rondaron sin éxito los palos defendidos por André Onana. Por su parte del conjunto de Amsterdam, terminó sufriendo y despojado de la calidad de su juego que lo llevó a ponerse en ventaja.

El promedio de edad del conjunto holandés es cercano a los 21 años, la misma cantidad que tuvo que esperar para volver a disputar una final de copas eurpeas. La última experiencia fue en la Champions, cuando le tocó caer ante la Juventus en 1996.

Así, la Europa League tendrá una definición de alto vuelo. El 24 de mayo se verán las caras dos históricos del viejo continente. Manchester United es el otro clasificado.